El impacto de la Educación Positiva en el aprendizaje

La educación no consiste sólo en la transmisión de contenidos. Según explica el Dr. Leonardo Medrano, Vicerrector de Investigación, Innovación y Posgrado de Siglo 21, “incluye experiencias que promueven el bienestar y el desarrollo personal de los estudiantes”.

El docente e investigador sostiene además que “si no tienen bienestar es difícil que las personas puedan afrontar desafíos y desarrollar su talento”. En este sentido, la Educación Positiva implica principalmente fortalecer un abordaje educativo integral.

Se trata de un modelo que contempla no solo el desarrollo de competencias y contenidos académicos, sino también la formación de las fortalezas de carácter y la promoción del bienestar.

El propósito del mencionado paradigma consiste en contribuir a mejorar el desempeño académico de las y los estudiantes, fortalecer sus vínculos sociales y fomentar la permanencia en los estudios.

Para ello es necesario promover un Ecosistema de Bienestar. Ello implica construir un espacio en donde los miembros de la comunidad educativa trabajen de forma sinérgica y coordinada para promover el bienestar de las personas.

Legitimar las emociones se convierte de esta manera en un proceso indispensable para el aprendizaje óptimo: aprendemos más y mejor cuando somos capaces de emocionarnos con la experiencia de estudiar.

De este modo, Universidad Siglo 21 se ha convertido en 2021 en la primera institución argentina en implementar el modelo de Educación Positiva.