#OperativoVerano
10/02/2016 | 07:01 | Una de los eventos más convocantes vibró al ritmo de las comparsas. El ritmo, brillo y color atraen a millones de personas.
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Los blocos están en la base de la comparsa (Informe de Gabriela Tessio)
El carnaval de Bahía, también conocido como el de Salvador es uno de los eventos más grandes del mundo al que atienden millones de personas todos los años convocados por el ritmo, brillo y color.
A diferencia de la celebración en Río de Janeiro, se desarrolla en las calles y no en un sambódromo por lo que los asistentes no sólo aprecian el espectáculo sino que forman parte de él.
En la base del carnaval se encuentran los blocos, un grupo de personas vestidas con las mismas remeras que organizan el espacio de la comparsa mediante sogas.
Desde los camarotes, una suerte de tribunas a lo largo de la ruta, también se puede apreciar el show. Esta estructura tiene una barra donde ofrecen cerveza y agua.
El carnaval de "pipoca" es otra forma de vivirlo saltando como "palomitas de maíz" ya que los espectadores lo disfrutan saltando junto a los blocos pero fuera de la soga.
El desfile vibra al ritmo de las batucadas que van acompañadas de orquestas conformadas únicamente por percusionistas que interpretan canciones de samba, axé, entre otros estilos.
Las calles se acondicionan de tríos eléctricos sobre unos camiones que durante tres días llevan música a los transeúntes.
Informe de Gabriela Tessio.