Cómo fue el cambio de Medellín para bajar los homicidios causados por el narco

En el año 1991, Medellín fue la ciudad más violenta del mundo con una tasa de 381 muertos por cada 100 mil habitantes, es decir casi 20 por día. La ciudad colombiana era símbolo de narcotráfico, violencia y corrupción, pero entre 1992 y 2020 se logró bajar en un 96% la tasa de muerte por homicidio y la capital de Antioquia se convirtió en modelo en materia de cambio.

El arquitecto y urbanista Gustavo Restrepo fue el responsable de llevar a cabo el Plan de Desarrollo de la alcaldía y en diálogo con Cadena 3 contó los detalles de una transformación que le cambió la vida a los habitantes de Medellín.

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"Es un tema que tiene varias variantes, pero la primera de todas fue una llamada de atención de la comunidad, los entes políticos municipales y departamentales, al gobierno nacional para que pusiera atención específica y montara un trabajo coordinado para atender la situación", explicó.

En ese sentido, el especialista destacó que fue fundamental el trabajo articulado entre el gobierno y la comunidad, para que esta última sea educada y tenga mayores oportunidades.

"Cuando el Estado estaba presente, a las organizaciones criminales les quedaba más difícil actuar; sobre todo con los jóvenes que son los que están más en riesgo con este tema", puntualizó.

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Ahora bien, a la hora de enumerar las medidas concretas, Restrepo aclaró que son necesarias al menos cuatro: una política pública de continuidad (al menos 21 años de políticas orientadas a mejorar la calidad de vida), transformación urbana de los territorios humildes, la participación ciudadana y una estrategia para dignificar la vida de los policías. 

"Es una decisión que ya lleva más de 20 años en acción y eso significa haber generado oportunidades de estudio, de empleo, pero sobre todo encontrar en que respetar la vida, era una oportunidad", sostuvo.

En tanto, señaló que la educación es el tema primordial para lograr una transformación profunda en las comunidades y lanzó una frase que sintetiza el éxito del modelo en Medellín: "Educarnos hacia el futuro, era la mejor manera de controlar la violencia".

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Además, Restrepo dejó en claro que la deserción escolar debe ser atendida, como también mejorar las condiciones y la accesibilidad a la educación básica y la universidad. 

Cada vez que le quitemos un niño o un joven a los narcos, es un niño menos en la guerra

Por último, remarcó que es necesario "dignificar la edificación donde habitan los policías. Trabajamos muchísimo en las instalaciones, con subestaciones de policías y centros de atención (...) Se hizo un trabajo muy fuerte dentro de la logística, para capacitar al oficial y tener un mayor control sobre el narcotráfico". 

Y concluyó: "Esto no es un tema de la ciudadanía, sino de la policía, la justicia y de la fiscalía. Es uno de los temas más complejos que hay, ya que un 90% de las capturas quedan impunes, pero yo creo que con un trabajo articulado de la gestión del Estado para fortalecer la justicia, se puede combatir de una manera más integral la problemática".

Entrevista de "Viva la Radio".