José Dabusti, el cura testigo del milagro de Juan Pablo I

En diálogo con Cadena 3 el sacerdote José Dabusti contó cómo ocurrió la sanación de Candela Giarda, atribuida al papa Juan Pablo I, y por el cual Albino Luciani será beatificado por la Iglesia Católica.

“Esta niña, que hoy tiene 21 años, tenía 11 cuando llegó a la Fundación Favaloro con el síndrome epiléptico por infección febril (Fires) que le provocaba convulsiones a diario”, relató.

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Y prosiguió: “El cuadro empezó en marzo (de 2011), la trasladaron de Paraná a Buenos Aires, yo acompañaba a su mamá que siempre venía a la parroquia, un día Roxana se acercó y me contó que Candela se había contagiado virus intrahospitalario y los médicos le dijeron que no pasaba esa noche”.

“Fuimos a la Fundación y le propuse a la madre y a los enfermeros pedir la curación a través de Juan Pablo I, por quien yo tenía devoción desde chico”, continuó.

“Transcurrieron las horas y la madre me dijo que había pasado la noche, fue evolucionando, le quitaron el respirador, la sacaron de terapia y luego perdí el contacto”, añadió.

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Dabusti reflexionó sobre aquel momento: “El Señor me inspiró y le pedí a Juan Pablo I que interceda, pusimos las manos unidas sobre el cuerpo de Candela”.

“En 2014 la reconocí a la mamá junto a Candela, que ya tenía 15 años y estaba totalmente recuperada. Le dije a Roxana que había que informar este hecho, mi hermano le llevó una carta al papa Francisco y todo siguió su curso normal por parte del Vaticano”, narró.

“El de Juan Pablo I fue el pontificado más corto (33 días), me impresionó por la alegría que desbordaba y la profunda humildad, me golpeó su muerte, le recé de chico y desde siempre me encomendé a él”, expresó.

Entrevista de "Viva la Radio".