La emoción de un cordobés tras ser vacunado por su hermana

Sebastián Cortez Oviedo es cordobés, docente universitario e investigador de Arquitectura. Tiene 39 años y padece asma bronquial, por lo que en diciembre se anotó para recibir la vacuna contra el coronavirus.

Finalmente su turno llegó para este lunes y su alegría fue doble: su hermana, trabajadora de salud, fue a quien por casualidad le tocó aplicarle la primera dosis de la vacuna Sputnik-V.

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Lo curioso es que la joven estaba en otro punto de vacunación y había sido trasladada a último momento. Además, en el vacunatorio había 9 boxes de vacunación, por lo que a Sebastián pudo tocarle cualquiera de los puestos.

"Tenía un deseo que fuese ella, pero había como 9 puestos. Me tocó con ella y fue un placer doble. La miré con esa mirada de amor entre hermanos, de pasear en bicicleta. Fue de verla crecer a que me coloque una vacuna que en este contexto es más que importante", expresó en diálogo con Cadena 3.

A su vez, el docente remarcó que le dio tranquilidad por su condición prexistente. "Me tocó ir temprano y compartir las miradas con los que llegaban, fue ver caras de tranquilidad y de decir al fin me tocó", concluyó.

"Los hermanos sean unidos, porque esa es la ley primera", celebró en sus redes sociales tras la inoculación.

Informe de Micaela Rodríguez.