El día que un avión se estrelló en la Manzana Jesuítica

Marcos Calligaris

Se trató de una tragedia y tuvo lugar el 17 de agosto de 1938, en pleno homenaje por el aniversario de la muerte de José de San Martín en la plaza homónima. Allí se encontraban, junto a una multitud, el gobernador Amadeo Sabattini y el intendente Donato Latella Frías, además de la IV División de Ejército al mando del general Abel Miranda. Esperaban el gran momento: el paso de un avión militar que debía arrojar dos ofrendas florales sobre el monumento del prócer. 

Promediaban las 15:30 cuando el biplaza Focke-Wulf 29 de la Escuela de Aviación Militar se aproximó volando muy bajo en dirección norte-sur, al mando del sargento ayudante Martín Mondragón (31 años) y tripulado por el subteniente Ángel Victoriano Hernández (25 años). Fue este último quien arrojó una corona de flores rojas ?que según testimonios de la época no dio en el blanco? y tras esto la aeronave rozó unas astas con banderas situadas sobre el Banco de Córdoba. 

De acuerdo a lo publicado el día siguiente por La Voz del Interior, tras "algunas oscilaciones extrañas" la aeronave "chocó con la cruz de la torre [de la Compañía de Jesús], torciéndola, perdiendo una parte del timón de cola y también el tren de aterrizaje". 

Finalmente, el avión "se estrelló contra la pared del invernáculo de la Facultad de Ingeniería, donde quedó colgado, con los dos cuerpos de los mencionados militares". Mondragón perdió la vida al instante, en tanto que Hernández murió más tarde en el hospital San Roque.