Como suele suceder, la cosecha arranca desde el norte, donde los cultivos se "terminan" antes. Y si bien todavía estamos en una etapa inicial, el problema está declarado y despierta mucha preocupación.
Según Augusto Battig, presidente de la Asociación de Productores del Norte Argentino (APRONOR), esto era algo que tanto productores como contratistas veían venir.
Sabíamos que esto iba a ocurrir, sobre todo al ver la suba del barril de petróleo y con la poca política y predicción de este gobierno, sabíamos que nos iban a castigar a nosotros los productores, porque somos los grandes consumidores en cantidad de combustible.
En diálogo con EL CAMPO HOY, explicó que algunos pudieron acopiar algo para encarar la campaña gruesa acá en el norte, "pero no sé si van a poder cubrir las expectativas con toda la superficie que tenían prevista".
En la zona ya están limitando la entrega de 1.000 a 2.000 litros, pero imaginate que una cosechadora grande eso le alcanza para dos días o tres. Es una situación preocupante, porque es el fin de un esfuerzo de muchos meses, de cuidar la planta, de sufrir por la falta de agua, de invertirle en agroinsumos para protegerlo de las malezas e insectos y ponerle fertilizante, y al momento de la cosecha el fantasma de la escasez de gasoil.
En el norte del país, recién se está iniciando a probar los primeros rindes con las sojas mayormente tempranas (sembradas al inicio de la campaña), pero todavía no se llegó ni al 5% del total, ya que se viene de un año Niña, por lo que se sembraron mayormente sojas tardías.
Esto va a impactara todos, no sólo al sector agrícola, como fue hace 15 años, que ibas por las avenidas y veías colas de 3 cuadras para cargar hasta 5 litros, es una pena como estamos retrocediendo con las políticas que lleva esta gente adelante, que no tengan previsto como conductores sabiendo que estamos levantando lo que va a ingresar divisa para ellos. El barco no tiene timón.
En cuanto a las manifestaciones, aseguró que están en contacto con las entidades de todo el país. Pero que cualquier medida que se tome tiene que ser de alto impacto.
"La medida tiene que ser contundente, no están los ánimos para estar desgastando a las bases con asambleas ni movilizaciones si no es algo contundente, tiene que ser algo muy federal y no solo sectorial. Están castigando a la seguridad, salud, educación, no solo al campo, todos debemos expresar nuestro descontento y buscar un rumbo para salir de esta situación. Pagamos retenciones hace más de 20 años, cada vez más y los índices somos más pobres, más niños desnutridos, menos seguridad, menos infraestructura, uno no le encuentra sentido a todo esto".
De norte a sur
Para Ángel Borello, productor de la zona de Rufino (Santa Fe), e integrante de la Sociedad Rural de Rosario, el tema se está complicando.
“En la zona se registra ya un importante faltante de gasoil, solo en algunas estaciones están despachando 150 litros cargados en el tanque y suspendida la venta a granel la venta en Venado Tuerto, Rufino y Santi Spíritu”. El productor agregó que desde anoche hay faltantes de nafta en esos lugares, sobre todo en las estaciones que están sobre la ruta.
"De los 3,800 millones de litros que consume el agro, 2,100 los consume la cadena granaria y el grueso se concentra en la etapa de cosecha. 250 millones de litros en cosecha y un grueso de 4 veces más a la hora del transporte a los puertos. Y eso entiendo que es lo que va a estar más comprometido aún: cómo trasladar los granos cosechados a los puertos", detalla Ignacio Mántaras, presidente de la Sociedad Rural de Santa Fe.
En este sentido, el ruralista hizo hincapié en un tema de fondo. "Es un tema central y estratégico que Argentina no lo resuelve, nuestra matriz logística es ineficiente, con más del 90 % del transporte es en camión, la demanda de gasoil de ferrocarril participan 2,5 puntos, el camión es 10 veces más ineficiente que en barcazas o 4 veces más ineficiente que en ferrocarril. Nunca resolvimos la matriz logística, y ante estos cuellos de botella salen a la luz cuestiones a resolver".
Desfasaje mortal
Para Alberto Boz, presidente de la Federación de Expendedores de Nafta de Argentina, el gasoil ya está faltando, algo que se veía venir. "A esta situación lamentablemente ya le veíamos venir, el desfasaje que hay entre el precio interno y el internacional nos venía dando este alerta, y ahora mucho más después de la invasión rusa, donde se disparó mucho más el barril de crudo, y el diferencial entre el interno y el externo se agrandó".
También explicó que históricamente, Argentina necesita importar para los picos de demanda que se dan en la época de la cosecha. "Todas las petroleras importan un 20 las que menos y un 30 las que más, de gasoil tanto sea grado 2 como grado 3. Pero que en estos momentos, las petroleras no quieren importar a pérdida".
La situación no es nueva. De hecho, ya viene ocurriendo, pero con la pandemia, la caída en el consumo lo disimulaba. "Consumía el campo pero no había el consumo de la actividad general. Entonces, el gasoil alcanzó, pero ahora, que volvemos a niveles pre pandemia de consumo, estamos con un faltante que preocupa".
Teléfono descompuesto
Boz afirma que vienen reclamando audiencias con las autoridades, pero que hasta ahora no fueron recibidos. "Tenemos audiencias pedidas pero lamentablemente no hemos tenido respuesta, ni con el secretario de energía ni con el ministro de la producción. Justamente, en estos momentos en los que estamos recuperando los valores pre pandemia, pero que no tenemos producto para vender, la situación de las estaciones de servicio es muy complicada. Si bien hubo dos aumentos (en febrero y en marzo, y de un 10 % cada uno), recordemos que el precio estuvo pisado por le gobierno todo el último semestre del año pasado".
