Atenas se encontró con la reacción de Racing de Chivilcoy, que le propuso una batalla física y se quedó con el segundo punto de la serie por 73-67 en el polideportivo Carlos Cerutti.
De esta manera, la final de la Liga Argentina quedó igualada 1-1 y se muda a la provincia de Buenos Aires. "El Griego" deberá ganar si o si alguno de los dos partidos, que se disputarán el próximo sábado y lunes, si quiere seguir con chances de ascenso.
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La figura de este juego 2, fue el interno de Racing, José Peralta, que con sus 17 puntos y 3 rebotes, fue quien comandó la remontada de su equipo, cuando en el comienzo del último cuarto, la visita caía por 53 a 49. También estuvo acompañado por el otro pívot, Emilio Stucky, que aportó 14 unidades.
En "El Griego", Lucas Arn volvió a ser el más determinante con 19 puntos, acompañado de Juan Cruz Oberto con 12 y José Montero con 11 tantos.
Todos los caminos conducen a Arn
Racing fue más inteligente. Supo aprovechar las oportunidades que le fue presentando el partido y no dudó. En una final tan pareja como esta, los detalles terminan definiendo a favor del más eficiente.
Cuando Atenas se presentó con Juan Cruz Oberto en el poste, la pelota fue a Stucky y Peralta, que le ganaron el duelo físico. Cuando Lucas Reyes (1,75m) ingresó para darle descanso a Nicolás Zurschmitten en la base "Griega", Racing buscó emparejarlo en el poste bajo y lo castigó con los hombres altos.
Emilio Stucky celebra un triple clave. (Foto: Germán Ruiz/Atenas)
Lo mismo sucedió con la figura de Atenas: Lucas Arn. El ala-pivote sufrió la incansable marca de "La Academia", que a diferencia del primer juego, lo defendió un paso más adelante y le sacó el triple. Sin tiro exterior, el capitán del equipo cordobés decidió forzar puntos en la pintura, pero siempre se encontró con dos y hasta tres jugadores para defenderlo.
El resultado fue una pobre actuación en los tiros de campo. Arn terminó con 19 puntos, pero tiró un 18% en dobles (2/11) y un 33% en triples (3/9). Para peor, fue el único jugador de Atenas que intentó tomar la batuta de la remontada y se encontró con un muro defensivo. Así es muy difícil.
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La esperanza es lo último que se pierde
Con el apoyo de más de 3 mil almas, Atenas tuvo la oportunidad para irse a Chivilcoy con la serie 2-0, pero volvió a caer en el juego 2, como en los cuartos de final ante Salta Basket y en la final de la Conferencia Norte con Sportivo Suardi y ahora deberá volver a batallar con alma y vida.
En ambos casos, "El Griego" logró revertir la serie y forzar un quinto juego en Córdoba. No obstante, siempre estuvo contra las cuerdas, ya que perdió el juego 3 y quedó 1-2 contra salteños y santafecinos.
Esta vez, tiene enfrente un equipo con mayor jerarquía y una localía muy complicada. Lleva 12 juegos invicto en el Grilon Arena (última derrota 26/1) y todavía no perdió de local en los playoffs. Pero siempre hay una primera vez y Atenas tiene material para lograr romper esa racha.
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Qué debe mejorar para la gira en Buenos Aires
La agresividad y la energía defensiva fueron dos aspectos que el equipo de Gustavo Peirone mostró en el arranque del segundo tiempo, cuando revirtió la desventaja de 6 puntos (31-37) y logró terminar el tercer cuarto al frente por 53-49. Sin embargo, en el último cuarto no lo pudo sostener y el cansancio físico se notó en varios jugadores.
Los rubros para mejorar son varios. El primero es que tiene que perder menos pelotas. Este martes terminó con 11 pérdidas y el domingo había cometido 12, pero esta vez Racing estuvo más fino en ofensiva y lo castigó mucho más en el contragolpe con 9 robos.
El segundo son los rebotes. Esta noche la diferencia a favor de los bonaerenses fue de 8 recobros a favor (37 a 29), con 8 rebotes ofensivos, que le permitieron puntos fáciles de segunda oportunidad.
El tercero son las variantes en ofensiva. La dependencia en la jerarquía de Arn (que fue el jugador que más minutos disputó con 40) es una trampa. Ni Zurschmitten, Buemo o Montero, lograron ser un factor en el perímetro y la ofensiva se tornó previsible. En ese embudo sobre Arn, "El Griego" se quedó sin puntos y el nerviosismo le jugó en contra.
Lucas Arn sufrió la marca inapelable de Racing. (Foto: Germán Ruiz/Atenas)
Tampoco el banco de suplentes fue productivo. Entre todos los suplentes anotaron nada más que 9 puntos. El mayor anotador fue el extranjero Chris Ware, que tuvo un gran primer tiempo con 7 unidades, pero que en el segundo tiempo no aportó en ataque y en defensa se lo notó sin convicción y energía.
Los otros dos suplentes que tuvieron minutos fueron Lucas Reyes, que estuvo 11 minutos en cancha, no anotó puntos y tampoco tiro al aro, mientras que el juvenil Matías Stanic (2 puntos en 4 minutos) mostró sacrificio defensivo en el primer tiempo, pero que no vio acción en el segundo tiempo.
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Está claro que para ganar, Atenas necesita mejorar en alguno de estos aspectos del juego. La buena noticia, o no tanto, es que en Córdoba, Racing no tuvo una buena efectividad desde el triple: el domingo lanzó un 28% (7/25) y esta noche 19% (5/26). Veremos si en Chivilcoy esa tendencia se revierte o sigue siendo un factor de dos partidos con bajo goleo por parte de "La Academia".
Todo está dicho. Ahora el Multicampeón del básquet nacional tendrá que viajar al interior profundo de la provincia de Buenos Aires para buscar una nueva proeza para agregar a su larga lista de hazañas.
Informe de Ignacio García Iturriza.
