El Salvador, el país que "adora" a su presidente
La mayoría de los salvadoreños manifiesta un apoyo generalizado a la política de guerra contra las pandillas implementada por el presidente Nayib Bukele desde el 2019, que se endureció el año pasado con el llamado Estado de Excepción.
11/04/2023 | 12:50Redacción Cadena 3
Caminar hoy por las calles de El salvador parece algo normal, pero hace unos cuatro años atrás era una misión imposible y de máximo riesgo.
La seguridad es una realidad desde que el presidente Nayib Bukele implementó, en el año 2019, una contundente política de guerra contra las pandillas que mantenían en vilo a la sociedad, y que se endureció el año pasado con el llamado Estado de Excepción.
La medida es polémica y ha sido duramente criticada por organismos de Derechos Humanos, entre otros puntos, restringe derechos y garantías individuales como la libre reunión, la inviolabilidad de la correspondencia y las comunicaciones, y faculta las detenciones sin orden judicial.
No obstante, el común de la sociedad se manifiesta conforme. “Ahora se puede trabajar bien. Antes no se podía entrar a las colonias. Ahora hay seguridad”, dijo a Cadena 3 un ciudadano salvadoreño que se dedica a hacer repartos.
/Inicio Código Embebido/
/Fin Código Embebido/
La seguridad en las calles es producto, principalmente de dos factores: la presencia de las fuerzas militares y que la mayoría de los líderes pandilleros han sido encerrados en cárceles de altísima seguridad. La parte negativa es que, como en todo régimen generalizado, hay errores de cálculo.
“El régimen está bien, pero también es cierto que hay algunos justos que están pagando por pecadores”, expresó el ciudadano.
“A muchos les han ensuciado el nombre. Los han encerrado hasta por un año, no les han encontrado pruebas ni nada, están tachados, pero su nombre ya fue ensuciado”, continuó.
Nayib Bukele ya ha anunciado que se presentará a las próximas elecciones con el objetivo de ser reelecto y continuar su mandato. Muchos se preguntan si este “margen de error” podría ser un alto precio político que deba pagar.
/Inicio Código Embebido/
/Fin Código Embebido/
Consultado respecto a si volvería a votar a su actual presidente, el ciudadano respondió: “Esa opinión me la voy a reservar. No estoy de acuerdo con algunas decisiones y leyes que él y su gobierno han tomado”, finalizó.
El Salvador es un país pequeño, tiene seis millones de habitantes y hasta hace algunos años ostentaba el mayor índice de homicidios del mundo. Hoy, la gente circula con normalidad.
Los ojos del mundo se posicionan hoy en Nayib Bukele y se preguntan si es posible implementar, en otros países de América Latina, el modelo de El salvador.
Informe de Marcos Calligaris, enviado especial de Cadena 3 a El Salvador.