Nueva Córdoba y el Centro, acechados por la delincuencia

Juan Federico

Fue el domingo. Los 18 adolescentes llegaron acompañados por un grupo de al menos tres mayores. Uno de ellos se destacaba por encima del resto, ya que claramente era mucho más grande. Con la mirada los iba manejando.

Los más jóvenes, de entre 13 y 18 años, pronto se desplegaron en grupos más reducidos, de cuatro o cinco. Y comenzaron a atacar en los alrededores del Parque Sarmiento, en un sector neurálgico de la ciudad de Córdoba.

Una atrocidad delictiva: en segundos, rodean a la víctima, y sin darle tiempo a nada la despojan de todo lo de valor que lleva encima. Celular, billetera, alhajas, bolso y hasta ropa.

Una naranjita, con un palo, logró poner a salvo a un cliente. Otros transeúntes no tuvieron la misma suerte.

Varias llamadas al 911 y el monitoreo en tiempo real de las cámaras de vigilancia motivó que la Policía pronto llegara al lugar y detuviera a nueve personas: siete, menores de 18 años.

En la fiscalía de turno, a cargo de José Bringas, confirmaron que entre viernes y domingo ingresaron tres denuncias que alertaban sobre ataques de este tipo en Nueva Córdoba.

Pero el lunes a la noche, no hubo ninguna denuncia. Sí se acumularon decenas de llamadas al 911, que resultaron falsas. Por los grupos de redes sociales, la paranoia fue colectiva: al video de los "pirañas" que atacaron el domingo en el Parque Sarmiento, la cadena de viralización le agregó dos videos sobre peleas a la salida de boliches, de tiempo atrás. Todo bajo un supuesto mismo denominador común.

La falsedad de la viralización puso al descubierto otra cuestión demasiada sensible: en Nueva Córdoba, los jóvenes piensan que es posible sufrir cualquier noche un ataque masivo de "pirañas". Es que la inseguridad está haciendo estragos, como en otros tantos puntos de la ciudad y de la provincia.

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Este martes a las 19, los vecinos de Colonia Tirolesa convocaron a una manifestación para exigir seguridad, tras el crimen ocurrido el domingo pasado. Norberto Muñoz (55) murió desangrado tras sufrir dos balazos en una pierna en su casa rural donde un ladrón lo sorprendió. El asesinato desnudó una precariedad en la prevención: sólo tres policías por turno y dos móviles disponibles en la comisaría local. A lo largo de varios kilómetros de radio, en Colonia Tirolesa hoy viven más de 11 mil vecinos.

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Pero volvamos a Nueva Córdoba y al Centro de la Capital provincial. En Cadena 3 revelamos días atrás que hay alumnos que se cambian el uniforme a la salida del colegio, para evitar que los ladrones de celulares los identifiquen como presas fáciles. Hay padres que hacen un seguimiento por GPS de todo el trayecto que sus hijos realizan desde la escuela a su casa; varios jóvenes llevan un celular en desuso en el bolsillo, por si aparece un motochoro y le exigen un teléfono; los arrebatos, coinciden cerca del Paseo del Buen Pastor y en el Parque Sarmiento, ya es una modalidad delictiva que se repite a diario. Hoy, caminar con un celular en la mano ya se ha convertido en una actividad de alto riesgo en esa parte de la ciudad.

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El viernes a las 19, un joven que iba caminando por pleno bulevar Illia hacia la Terminal de Ómnibus tuvo que frenar su marcha al toparse de frente con el caño de un revólver. Su familia agradece que "sólo" le robaron el teléfono.

Es en todo este contexto en el que las "pirañas" también proliferan. Si bien se se le quitó crédito a un ataque masivo el lunes a la noche, nadie puede desmentir que esta modalidad delictiva continúa proliferando en esta parte de la ciudad.

Hoy, en las encuestas que sigue el poder político en Córdoba, la inseguridad figura como la máxima preocupación de los ciudadanos, incluso por encima de la crisis que sacude los bolsillos.

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