El Presidente no encuentra su lugar en la cancha

Sergio Berensztein

 -Yo creo que el presidente encontró su lugar en la cancha del sistema político. Lo que le cuesta es cómo se establece el vínculo con sus socios políticos del Frente de Todos. Y ahora bueno, nos sorprende con esta incursión en la diplomacia de alto nivel .

- El presidente busca ser mediador, nada más y nada menos, en el principal conflicto bélico que existe hoy en el mundo en Ucrania. El presidente de se ve como protagonista de la cumbre del G20 que pronto empezará en la paradisíaca Bali, en Indonesia.

-Y bueno, antes va a París.En parte porque quiere salir del atolladero doméstico. Obviamente, la política exterior es muy comúnmente usada por los presidentes, por los mandatarios, para buscar un poquito de oxígeno. Lo que no encuentran en casa, lo buscan afuera.

- En la práctica me parece que profundiza una situación que no es nueva. Y es que le cuesta realmente entender las atribuciones la cara influencia potencial que puede tener un presidente de un país empobrecido.

- En este caso, el presidente de la Argentina, muy devaluado en su país, muy maltratado por sus socios políticos. Lo tratan de aventurero, de mequetrefe,no le ahorran disminución de imagen. Se autopercibe alguien capaz de ocupar el escenario internacional y mediar en la guerra de Ucrania.

- Es realmente casi un caso para la psicología. La investidura efectivamente permite participar. Por ejemplo, la reunión del G20 lo recibe como un primer mandatario, pero el poder real obviamente es otro. Y, por supuesto, el resto de los actores del mundo comprenden perfectamente la situación de Alberto Fernández. Con lo cual finalmente esa situación de fuera de juego no es solamente doméstica.