Frente de casi todos: se fue Grabois

Por Sergio Berensztein

 -Estamos frente a un contexto en el cual la coalición gobernante recupera protagonismo y centralidad con Cristina y aparentemente, también hay una unidad. O parecería haber unidad detrás de objetivos muy importantes, fundamentalmente la suerte de la vicepresidenta y también activa un conjunto significativo de apoyos.

-Inventan palabras raras como Marcó del Pont que elige decir “desaceleración en el aumento del gasto”, para no decir ajuste.Lo importante aquí es que hubo una decisión que parece simbólica, tal vez no muy importante en materia electoral o política, pero sí simbólica.

-Grabois es un líder piquetero, pero tambien político, con mucho apoyo, sobre todo en los sectores más vinculados a la Iglesia católica, particularmente el Papa Francisco, un joven que hoy tiene una gran inserción mediática que parecía cercano a Máximo Kirchner.

-Y sin embargo, en medio de lo que el kirchnerismo entiende como una ofensiva en contra de Cristina, rompe precisamente por el giro pragmático de la política económica del gobierno, del Frente de Todos. Eso me parece significativo porque los recortes empiezan y se van a sentir en las facturas de luz y gas.

-Me parece que la reacción va a ser mucho más nítida y creo que Grabois apuesta a intentar capitalizar el descontento. Pero en la práctica, lo que marca es una ruptura en un contexto en el cual el frente de todos necesita más que nunca.

-Por un lado, Grabois está cada vez más pegado a Cristina en la calle, en donde el kirchnerismo quiere usar como escenario de su batalla y al mismo tiempo, cada vez más lejos del gobierno de Cristina.

-La narrativa populista entusiasma .Mucha gente no comprende la naturaleza de la economía política. Hay muchos sectores de la política argentina que plantean consignas voluntaristas, algo románticas, pero que bueno, cuando chocan con la realidad de los números, naturalmente se generan profundas contradicciones. Creo que por ahí pasa.

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