La menemización tardía de Javier Milei

Sergio Berensztein

 - La memoria cíclica de los argentinos. Salimos de un gobierno que reivindicaba a los setenta. Este será un gobierno que reivindica a los noventa. La verdad es que a mí me fascinan estos recortes siempre arbitrarios que hacen políticos o figuras intelectuales.

-Milei cuando era columnista de televisión, siempre reivindicó el gobierno de Menem. Digo tardía, porque durante la campaña eso no quedó muy explícito. Quedaba como desplazado por las consignas más dominantes: la dolarización, el combate la casta .

-Menem terminó siendo un líder circunspecto jugando con las reglas del sistema, se había convertido en el presidente del sistema, incluso pensando en lo que era el mundo en esa época, la alianza con Estados Unidos.

-Siempre Milei e presentó como más irreverente, como un candidato que buscaba cuestionar justamente las formas y los contenidos de la política tradicional. Por eso, ahora que lo vemos girando, hacer pragmatismo con más sentido común de lo esperado, hicimos un sondeo y hubiera sacado mucho más votos.

- Milei si ponía este programa sobre la mesa, mucha más gente lo hubiera votado más convencida en primera vuelta. Menem decía aquello que si les anticipaba lo que iba a hacer, no lo votaban. Esto vendría a ser al revés. Exactamente. Ahora vienen las preocupaciones.

-¿ Por qué? Bueno, porque el menemismo fue una experiencia tal vez exitosa en un tiempito en lo económico, pero terminó con mucho desempleo. Terminó con una Argentina desbordada de gasto público. Nunca se hicieron las correcciones macroeconómicas necesarias. Tampoco las reformas de segunda generación, educación, salud ,la reforma laboral.

- Esa agenda quedó trunca, pero sobre todo el Menem mismo estuvo caracterizado por escándalos de corrupción realmente extraordinarios para esa época. Pero para esa época era impresionante y un desgaste de las instituciones por un manejo discrecional y sobre todo, por esta tendencia al hiperpresidencialismo