La cuarentena también puede ser negocio

La pandemia pone a la economía bajo un tremendo estrés, miles de empresas y empleos sufren el golpe de no poder trabajar o de un consumo que se ha esfumado.

Pero no es igual para todos. Hay algunos, unos pocos sectores, para los que la cuarentena no es mal negocio. El caso más obvio es el de los seguros. Sin circulación de autos, los accidentes han caído fuertemente. Negocio para las aseguradoras. Cobran la misma póliza, pero tienen muchos menos gastos. La Aseguradoras de Riesgo de Trabajo, parecido: el solo hecho de que menos gente se traslade al trabajo reduce los siniestros. Por supuesto, a la larga, los seguros también se perjudicarían con un colapso económico. Pero en lo inmediato, no está mal.

El caso más paradójico es el de los seguros de salud. Se supone que una pandemia lleva al extremo el gasto en salud y los perjudicaría. Pero es no sucede, al menos por ahora. Tanto las obras sociales como las prepagas siguen cobrando aportes y cuotas pero las clínicas y sanatorios estuvieron vacíos al principio de la cuarentena y ahora están a media máquina. Los médicos calculan que el gasto de los seguros de salud en prestaciones médicas están hoy reducidos a la mitad. En medicamentos, algo menos. El gasto que mantienen es, sobre todo, en tratamientos y medicamentos crónicos.

Anteayer, Claudio Belocopitt presidente de la cámara que agrupa a los seguros de salud y dueño de Swiss Medical Group metió miedo para resaltar que la cuarentena debe seguir. “En 4 o 5 semanas podría colapsar el sistema de salud”, dijo, aunque ya llevamos 89 días y se supone que ya hubo más que tiempo para preparar los hospitales.

Belocopitt planteó las cosas en blanco y negro. Dijo que si se libera hay que decirle a la gente que la consecuencia puede ser un colapso. Y que la alternativa es volver a un confinamiento más estricto. “La decisión queda en manos de la política”, dijo.

Dicho así, no hay alternativa. Pero entonces hay que echarle un chorro de soda a declaraciones como estas. Dependiendo del tipo de cartera que tienen, estiman en clínicas y sanatorios, el gasto de las obras sociales y los seguros de salud ha caído en un 30%. Por que la cuarentena, en algunos casos, no se lleva a las patadas con la economía.