Carla Conte luce sus canas con orgullo a los 43 años

La actriz fue una de las tantas que decidió cambiar su look durante la cuarentena, pero a diferencia de muchas, optó por dejar de teñirse para ocultar sus canas.

“La idea de dejar de teñirme la vengo amasando en mi cabeza hace mucho tiempo. El año pasado cuando se corta mi trabajo que hacía desde hace tres años de lunes a viernes, lo primero que pensé es ‘no me tiño más’. Le daba vuelta al tema porque odiaba las raíces, la obligación de tener que teñirme cada tres semanas me parecía una cárcel”, inició relatando Conte en un video que compartió en su perfil de Instagram.

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En el mismo, la conductora reveló que tener que estar en su domicilio y lejos de la pantalla fueron el puntapié inicial para tomar la decisión que ya venía masticando: “Teñirme es algo que surgió por el trabajo, no es que odiaba mis canas, lo tenía que hacer porque cada vez tenía más canas y estaba presa de la imagen por el trabajo y por estar tan expuesta. Cuando me quedé sin laburo dije ‘listo’ y no lo sufrí”.

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Sobre el proceso, reveló que ver cómo le crecían las canas le generaba "felicidad y alegría". “Me parecía un color hermoso, lo disfruté y estuvo buenísimo. Después volví a laburar una vez por semana, y tuve mis dudas, me teñí un poco el frente hasta que dije 'salgo así y que se note'”.

“En el medio la ansiedad, me corté, por eso está corto sueño con tener un pelo largo y canoso que ya será. Lo viví con alegría y recibí comentarios negativos, incluso tuve una batalla con mi mamá que no lo quería, que al día de hoy se tiñe y se tiñe pero es de otra generación y las canas en su cabeza le dan vejez y no lo veo así, me parece un color precioso el plateado”, narró Conte.

“No me siento vieja, me he sentido vieja hace diez años y no tenía que ver con el pelo”, aseguró.

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A pesar de que está feliz y confiada de su nueva imagen, la conductora admitió que volver a la televisión le presentó "un desafío": “La morocha argentina no es más morocha, es plateada. Si me siento linda o fea no tiene que ver con el pelo, sino con que las mujeres somos así, a veces nos sentimos mejor y otras no tanto. Yo veo a una mujer nueva naciendo y me encanta”.