Julieta Prandi contó el calvario que vivió con su ex marido

Julieta Prandi estuvo este domingo en el living de Susana Giménez y contó el calvario que vivió con Claudio Contardi, su ex marido y padre de sus hijos.

Ambos estuvieron en pareja entre el 2000 y el 2005, luego se reencontraron en 2008 y en 2009 comenzó la convivencia. "Yo estaba enamorada, soy muy Susanita”, reveló Prandi a Susana.

Desde entonces, según detalló Prandi vivió una situación de violencia económica y manipulación por parte de su ex marido quien le manejaba sus sueldos y hacía sus ventas.

La modelo conto que tenía un departamento de soltera él puso a nombre de un hijo suyo, Ezequiel, fruto de una relación anterior con la idea de comprar una casa juntos. Sin embargo, cuando compró un nuevo departamento lo escrituró a nombre de él y de su mamá, dejando sin nada a Prandi.

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Además, tras casarse compraron varias propiedades y autos, pero ella no manejaba absolutamente nada de sus bienes. Según detalló, los vehículos los ponía a nombre de testaferros. “Le firmé un poder administrativo general: cobraba mis sueldos, hacía mis ventas, lo tenía por una cuestión organizativa. Fui muy confiada”, lamentó.

Si bien están separados desde marzo del año pasado, hasta hace poco continuaban viviendo bajo el mismo techo porque su ex no aceptaba la situación. “Vivimos un año muy difícil, me di cuenta de mentiras y manipulación de él, como persona había muchas falencias. Todos los días descubro algo nuevo”, subrayó.

“No creo que me haya amado; esto no es amor. No me consta su fidelidad”, agregó y aseveró que tuvo que pedir un crédito para poder alquilar un departamento con el objetivo de irse a vivir con sus hijos, y que solo se llevó “lo puesto”.

Y también señaló que la justicia todavía no notificó a su ex marido para que pague los alimentos porque “no tiene timbre en la casa de Martínez” donde vive.

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“La relación como pareja falló. Él ya había comenzado su vida hace rato. Confío en que la Justicia va a accionar. La causa de violencia la están llevando muy bien, yo estoy en terapia, Mateo (uno de sus hijos) también, él entiende y cuenta todo. Gracias a que Mateo habló conmigo y yo pude ver lo que le pasaba a él es que decido hacer la denuncia de violencia. Desde marzo a octubre Mateo guardó silencio. Lo más terrible para mí fue ver en Mateo a Julieta”, manifestó en referencia a las agresiones vividas y aseguró que tuvo que presentar el divorcio de manera unilateral.

“El día que me fui de la casa fue muy tenso, me fui entre gritos y otras cosas más. Agradezco al cielo todo los días que no hubo violencia física, es lo único que no hubo. Todo lo que pasó fue violencia económica. Mi carrera fue siempre bendecida”, señaló.

Por último Prandi reflexionó: “A veces siento que fue planeado. En mí vio una persona ingenua y confiada, cuando quiero me entrego y confío. ¿Cómo voy a pensar que embarazada y a seis meses de casarme iban a estafarme?”.

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Y sostuvo: “El que te controla no lo hace tan evidente. Cada vez el control es más hasta que un día decís ‘no respiro’. Aguanté hasta que sentí que no se podía aguantar más, había cosas muy grosas”.

Por último aunque aseguró que no perdió las esperanzas de volver a enamorarse, afirmó que "no volvería a casarse".

“No me volvería a casar: eso no fue amor, fue una enfermedad” expresó y concluyó: “Lo material va a volver, lo construí yo, pero mi libertad no tiene precio”.