En San Francisco, las vacas se comen el trigo malogrado
Desde el INTA afirman que a causa de la seca, los agricultores venden los lotes con cereal en pie a los tamberos, para salvar los costos y evitar una cosecha paupérrima.
03/11/2022 | 17:48Redacción Cadena 3
Según comentó a EL CAMPO HOY, el jefe de la Agencia San Francisco, Ing. Alejandro Centeno, la sequía está provocando una situación atípica entre agricultores y tamberos, en gran parte de esa área de influencia. Por un lado, la escasez de reservas (por dos malas campañas maiceras consecutivas) que hace que los tambos tengan poca disponibilidad de pasto y forrajes en plena primavera y por el otro, el daño que recibieron los trigos por la falta de lluvias y las heladas tardías, condicionando su rendimiento final, se combinaron para ocasionar una negociación forzada entre los productores de estas dos actividades.
La sequía está provocando una situación atípica entre agricultores y tamberos, en gran parte de esa área de influencia
“Se están generando negocios que tienen que ver con la venta de los trigos en pie, porque el productor agrícola ve que su producción no será suficiente como para cubrir los gastos de cosecha” y quiere al menos salvar la ropa, como se dice habitualmente, antes de perder todo.
“Esos lotes se están ofertando en la región a productores ganaderos y lecheros, los cuales están aprovechando y utilizando para la confección de reservas, ya sea a través de picado o para heno en forma de rollos o megafardos”, describe Centeno.
“Si bien este material no tiene muy buena calidad, aporta una fibra interesante para las dietas de aquellas vacas lecheras que están encerradas con raciones totalmente mezcladas (TMR)”, explica el técnico del INTA.
Productores ganaderos y lecheros están aprovechando para la confección de reservas, ya sea a través de picado o para heno en forma de rollos o megafardos
Según estiman en el área de San Francisco, de las habituales 300.000 hectáreas que se ocupaban con trigo en las últimas campañas, aproximadamente sólo se implantó la mitad en este ciclo, y de ese volumen unas 45.000 hectáreas no llegarán a cosecha, ya que se están negociando con productores lecheros de la región. El resto de los lotes, obtendrán un rendimiento promedio de 12 qq/ha, lo cual en muchos casos, quedará en los campos como barbecho de la próxima siembra.