Bahía Blanca: la lucha de los vecinos contra el barro y la desesperanza
Las lluvias reavivan el temor en Bahía Blanca, donde la comunidad enfrenta los estragos de inundaciones recientes. La economía local se paraliza y la solidaridad emerge como única esperanza en medio del caos.
20/03/2025 | 19:36Redacción Cadena 3
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Informados al regreso
Las alarmas no dejan de sonar en Bahía Blanca. "Otra vez lluvia, otra vez", repiten sin cesar los vecinos, atrapados entre el recuerdo del temporal que arrasó la ciudad hace casi dos semanas y la urgencia de que el calor seque el agua y el barro que aún invaden sus vidas. En la ciudad y en las comunas más golpeadas.
General Cerri e Ingeniero White, el trabajo es frenético: máquinas y camiones no dan abasto para retirar las montañas de pertenencias destruidas que las familias apilan en las calles. "Perdimos prácticamente todo", es el eco que resuena en cada rincón.
General Cerri, el epicentro del desastre. De sus 10.000 habitantes, el 90% sufrió los embates de la inundación.
Las historias estremecen: personas con el agua al cuello, horas interminables sobre los techos, y el despertar abrupto con el agua ya encima.
Algunos hablan de una ola repentina cerca de la Ruta 3, donde aún yace, a más de 200 metros de la carretera, el utilitario rojo de Rubén Omar Salazar. Este héroe intentó salvar a las hermanitas Pilar y Delfina Hecker, de 1 y 5 años, desaparecidas en la tragedia.
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La camioneta, incrustada en un campo, es un testigo mudo de la furia del agua. "Ya no hay esperanza de encontrarlas con vida", admiten con dolor los vecinos, mientras la incertidumbre persiste.
En Bahía Blanca, el Hospital Penna sigue siendo un símbolo de resistencia. Hace dos semanas, las enfermeras se convirtieron en heroínas al rescatar bebés de las incubadoras, apretándolos contra el pecho mientras el agua subía.
Hoy, el nosocomio es un escenario caótico: la planta baja y el subsuelo están inutilizados, con retroexcavadoras removiendo barro mezclado con desechos.
Gabriela, enfermera del área de anestesiología en con más de 10 años en el hospital, en diálogo con Cadena 3 expresó: "Está complicado, pero de a poco se van dando los servicios. Nunca imaginé ver el hospital así", confesó.
"Es nuestro lugar de trabajo, donde brindamos amor y sostén", añadió, evocando la imagen de sus compañeras salvando vidas contra reloj.
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En una conversación con Cadena 3, Miguel Puch expresó su deseo de ayudar a rescatar la cultura a través de la música.
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Arriba, en las plantas superiores, la atención se reanuda como puede, con un esfuerzo colectivo que incluye a médicos, enfermeros, personal de limpieza y seguridad.
La palabra "limpiar" se ha vuelto una obsesión en la región. En colegios, hospitales y hogares, los trabajadores barren, palean y secan sin descanso.
Terminan sus jornadas laborales y regresan a casa a seguir limpiando. El barro, ese enemigo persistente, se niega a ceder del todo, mientras el calor, aliado necesario, empieza a hacer su parte.
En General Cerri las urgencias apremian. "Todos están afectados, muchos perdieron sus negocios y no tienen cómo empezar de nuevo", cuentan los vecinos.
La economía local, se frenará si no llegan fondos y políticas concretas para reactivarla. Entre el barro que se resiste y la espera por respuestas, Bahía Blanca y sus comunas vecinas libran una batalla contra el tiempo, la naturaleza y la desesperanza, aferrándose a la solidaridad y al esfuerzo colectivo como únicas certezas.
Informe de Juan Federico
