El padre Munir Bracco advirtió: “Los jóvenes viven una pandemia de juego online”
El titular de la Pastoral Social de Córdoba, en diálogo con Cadena 3, alertó sobre el daño social de ese flageo y enfatizó la urgencia de hablar con los adolescentes.
20/03/2025 | 19:23Redacción Cadena 3
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Informados al regreso
Un reciente informe de UNICEF encendió las alarmas al revelar que el 80% de los adolescentes argentinos consultados accedió o conoce a alguien que utilizó sitios de apuestas ilegales en el último año, un fenómeno que la organización calificó como un “ingreso masivo” de los jóvenes al mundo del juego.
Más preocupante aún, el promedio de edad de inicio se sitúa en los 13 años, lo que expone la vulnerabilidad de chicos y adolescentes frente a esta problemática que, según expertos, se extiende como una “pandemia silenciosa”.
El padre Munir Bracco, titular de la Pastoral Social de Córdoba, en diálogo con Cadena 3 analizó el impacto de estos datos que, aunque impactantes, no sorprenden a quienes vienen trabajando el tema desde hace años.
“Son datos que reflejan lo que venimos advirtiendo desde la Iglesia y la Pastoral Social a nivel nacional. Desde antes de que se aprobara el juego online en Córdoba a fines de 2021, venimos batallando contra esto y alertando que cada vez es peor”, señaló Bracco.
“Estamos frente a otra pandemia, esto está haciendo un daño terrible”, afirmó el presbítero.
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Cardenal Rossi:
— Pastoral Social Cba (@pastsocialcba) January 19, 2025
"La desesperación que lleva a algunos a ser seducidos por la solución mágica del juego o las apuestas online, las cuales son presentadas como entretenimiento por dirigentes y empresarios en una vergonzosa complicidad".@IglesiaCordobahttps://t.co/i77uTsu7Kw
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Y agregó: “Vemos chicos que apuestan en aplicaciones, en sitios de todo tipo, y las consecuencias son devastadoras”.
“Familias desesperadas de colegios privados nos cuentan de deudas en dólares importantísimas. Los propios padres piden ayuda a las escuelas porque no saben qué hacer”, relató Munir.
En ese sentido, destacó que el comportamiento de los chicos refleja un cambio profundo: “Antes, cuando sonaba el timbre, salíamos a jugar a la pelota. Hoy, en los recreos, cada uno se va a un rincón con su celular. No interactúan, no socializan”.
Docentes de escuelas públicas y religiosas también han solicitado la intervención de la Pastoral. “No hace un mes que empezaron las clases y ya nos piden que vayamos a hablar con los chicos porque lo que ven es desesperante”, añadió Blanco.
Ansiedad, aislamiento y la búsqueda de “dinero fácil” son algunos de los signos que detectan quienes están cerca de los adolescentes.
“Es clave generar espacios de diálogo en casa, en las escuelas. Preguntarles qué les pasa, por qué apuestan. Si no, quedan encerrados en ese mundo”, subrayó Bracco.
Munir apuntó a videos que circulan en redes donde jóvenes incentivan a otros a dejar los estudios con frases como: “¿Para qué vas a perder tiempo en la universidad? Yo te enseño cómo hacer plata fácil y mucho”.
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Educación y oportunidades. A través de una ONG, una arquitecta logró que los chicos no abandonen la escuela
La organización acompaña a niños y adultos en situación de vulnerabilidad. En la actualidad, más de 60 personas ya se graduaron gracias a su ayuda y otras 40 están estudiando en la universidad.
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Este mensaje, combinado con la promesa de emociones intensas y recompensas inmediatas, seduce a adolescentes en plena construcción de su identidad.
“Los chicos apuestan porque creen que pueden salvar su vida o ganar dinero rápido, pero terminan perdiendo todo. Hay casos de familias que vendieron hectáreas de campo para pagar deudas. Y cuando no pueden devolver, la cosa se pone fea. No te manda una secretaria a recordártelo, es mucho más pesado”, advirtió.
“Los chicos son víctimas de un asedio de gente sin escrúpulos que no duda en destruir vidas por amor al dinero”, afirmó el titular de Pastoral Social, quien llamó a una acción conjunta entre familias, escuelas y el Estado.
“El diálogo en casa es el primer paso, pero el Estado tiene un rol preponderante. No se trata solo de prohibir, sino de educar y poner límites saludables”, insistió Bracco.
“Apostar, sea en un sitio legal o ilegal, es dañino. El cerebro de un adolescente no distingue eso, solo busca la apuesta”, sentenció el sacerdote.
Para Bracco, la lucha contra esta “pandemia” no debe decaer. “Los jóvenes tienen vida, transmiten esperanza. Todo esfuerzo por dialogar, por educar, vale la pena”
Entrevista de "Informados al Regreso"
