Especialista equiparó el derecho al paro docente con el de los niños a educarse

Este lunes comenzaron las clases en diez jurisdicciones del país, pero en el resto hubo problemas por medidas de fuerza de los maestros. 

El paro docente tuvo un acatamiento del 54 por ciento y, a esta medida, se sumó el ritual de los últimos años del denominado “Último primer día”, en el que los alumnos del último año llegan sin dormir y en malas condiciones por consumo de alcohol, generando inconveniente en los establecimientos.

Frente a esta problemática que se repite año tras año, Gustavo Zórzoli, especialista en educación, expresó este lunes su pensamiento, en diálogo con Cadena 3.

En varias provincias, las clases no comenzaron de manera adecuada, se habla de calendarios escolares, pero después se caen por medidas de fuerza tomadas por los docentes.

El 'Último primer día' perjudica el comienzo de las clases. Los chicos llegan el primer día sin dormir y algunos, borrachos. También hay sustancias problemáticas. La escuela tiene inconvenientes, porque no puede dejar a los chicos en la vereda y es otro día menos de clase.

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El rito solía hacerse en una fiesta de fin de curso en un boliche. En Buenos Aires, avisábamos a la familia que los chicos el día posterior no podían ingresar a la escuela para evitar estos problemas. Hoy se reúnen en parques o casas de familia.

La familia es muy responsable. Saben que su hijo no durmió en su casa el día anterior al inicio de clases. Hay consumo de alcohol y alguna otra cosa que no sólo perjudica a esos chicos, sino que complica al resto de los cursos, que no tienen nada que ver con el festejo.

En Argentina, cada vez somos más laxos. Siempre los dejamos hacer. De cada 100 chicos que ingresan a la secundaria, sólo 16 terminan en tiempo y forma.

Uno de los gremios no firmó el acta paritaria y, en los últimos 20 años, con mejores y peores acuerdos, el mismo gremio nunca los firmó. También se puede hablar de ritual. 

Los ministros hacen el esfuerzo para que comiencen las clases y, en Argentina, el problema es grave. La presión es fuerte y la política debería declarar a la educación como un servicio esencial.

Hoy la medida de fuerza tuvo un acatamiento del 54 por ciento en todos los turnos. La disparidad está muy vinculada a dónde trabajan los docentes: si es en la gestión pública o privada y tiene que ver con cómo se gestiona el sistema educativo.

El derecho constitucional de hacer paro que tienen los docentes es igual que el derecho del niño de recibir educación. 

Entrevista de "Informados, al regreso".