Rusia canceló la orden de evacuar un pueblo por radiación

Las autoridades de Rusia cancelaron este martes la evacuación de una localidad situada cerca de la base militar donde la semana pasada tuvo lugar una explosión durante la prueba de un propulsor experimental para misiles, que provocó la muerte de siete personas y habría dispersado toda la radiación.

La administración de la ciudad de Severodvinsk indicó que el Ejército "anunció la suspensión de las actividades planificadas para este miércoles", por lo que los residentes en la localidad de Nyonoksa "no deberán abandonar sus hogares", según la agencia de noticias Sputnik.

Horas antes, Xenia Yudina, portavoz de la administración, había afirmado que "el departamento territorial de Nyonoksa fue notificado de las actividades planificadas de los cuerpos de mando militar", y agregó que "se les pidió a los residentes de Nyonoksa que abandonaran el pueblo mientras se realicen las actividades en la mañana del miércoles".

El anuncio se produjo horas después de que la agencia meteorológica rusa Rosgidromet publicara que los niveles de radiación nuclear en la zona de Severodvinsk aumentaron entre cuatro y 16 veces tras el incidente de la semana pasada.

La posición del Kremlin

El Ministerio de Defensa había afirmado antes que la radiación no había cambiado luego del incidente, a pesar de que las autoridades de Severodvinsk informaban que hubo un aumento en el nivel de la misma. Greenpeace calcula un incremento de 20 veces en el nivel de radiación nuclear.

Por su parte, el Kremlin descartó riesgos para la salud de la población tras el incidente y sostuvo que "no debe caber duda de que todas las instituciones competentes garantizan completamente la seguridad de los ciudadanos".

El portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, añadió que "las autoridades hacen todo lo necesario", y ha pedido a la población que consulte la información oficial y no la publicada por los medios.

El pasado viernes, siete personas, entre ellos cinco científicos, murieron en un incidente durante la prueba de un propulsor de un cohete Burevestnik. Diversos especialistas estiman que este proyectil es propulsado con energía nuclear, y que durante el incidente se dispersó toda la radiación.

Informe de Marcos Calligaris.