Mejor explicar que comparar

Fernando Genesir

La embajada de Suecia le respondió ayer al presidente Alberto Fernández luego de que el viernes cuestionara la estrategia seguida por ese país europeo para enfrentar el coronavirus.

Recordemos que Fernández había salido al cruce de los que “con impaciencia hablan de abrir la economía” y ponen al “modelo sueco” como ejemplo y entonces dijo que Suecia, con 10 millones de habitantes hoy tiene 3.000 muertos y que, de haber seguido ese ejemplo, Argentina tendría 13.000 muertos.

Pero además Fernández comparó a Suecia con Noruega, país limítrofe donde se implementó una cuarentena estricta y dijo que "Suecia tuvo 14 veces más muertos que Noruega".

Lo otro que llamó la atención fue que Alberto Fernández dijo que no le iban a torcer el brazo y que "si abrimos la economía vamos a terminar como terminó Suecia".

Y en la misma conferencia terminó anunciando la apertura de la economía.

En su comunicado, la embajada sueca dice que "esta es una nueva enfermedad y pasará tiempo antes de que sepamos qué modelos funcionan mejor".

Y aclara que pese a las diferencias en las medidas tomadas con otros países, en Suecia también se busca "salvar vidas y proteger la salud pública".

Detalla las decisiones que tomó el gobierno sueco para combatir la pandemia y niega que la vida en ese país continúe de forma normal. De hecho, desmiente que una cuarentena menos rígida que en otros países evite un derrumbe económico y el desempleo.

Sin mencionarlo al Presidente, remarca que es "difícil hacer comparaciones directas entre las medidas de contención que han adoptado diferentes países".

En ese sentido, la embajada aclaró que algunas de las áreas que no se paralizaron en ese país responden a "consideraciones de salud pública" y no a "intereses económicos".

Por ejemplo, ellos decidieron mantener los jardines de infantes y las escuelas primarias. Y dicen que eso "tiene efectos positivos en la salud infantil y permitir que las personas trabajen es positivo para la salud pública" y que "también fortalecen la igualdad de género".

En el comunicado, Suecia aseguró estar "abierta a dialogar con otros países" para generar aprendizajes mutuos.

Si, definitivamente se entiende la diferencia. Son muy distintos a nosotros.

Nosotros, además de encerrarnos, ¿estamos abiertos a dialogar con otros países para generar aprendizajes mutuos?

¿Encerrarnos a tiempo nos da mérito para criticar a otros países? Países con los que no competimos y que ni siquiera se han referido a nosotros!

Que no se haya disparado la curva de contagiados y que tengamos pocos muertos, ¿nos permite asegurar que nuestra estrategia es la acertada?

Es cierto que venimos bien, pero el partido no terminó.

La verdad es que no me parece inteligente seguir el camino de la disputa.

Una cosa es decir que si abrimos la economía nos va a ir como Suecia, generando una confrontación entre dos modelos, y otra cosa es decir "me cuentan del ejemplo de Suecia" pero yo les quiero mostrar los números de Argentina que son los que me convencen que este es el mejor camino... Pero sin comparar, sin juzgar que los otros eligieron la estrategia equivocada.

Sin embargo, el Presidente insiste en comparar el rendimiento de su estrategia con la que siguen otros países: primero fue con Chile y ahora con Suecia.

Además, cada país elige su manera de enfrentar al virus en función de lo que le aconsejan sus epidemiólogos. En Suecia sostienen que la apuesta es sostener ese plan de acá a un año y que hay que ver como termina Argentina de acá a un año.

Si vamos a comparar, habría que ver también cómo son los sistemas de salud pública en cada país y cómo están preparados para enfrentar el pico del virus. Eso también define las estrategias y los tiempos.

Por eso, hay que ver la lucha a mediano y largo plazo.

Que hoy los números de Argentina estén dando bien, no nos habilita para hablar de los muertos que tienen otros países.

Mejor explicar, que comparar.

Como escribió el colega y amigo Claudio Fantini, haría bien el Presidente si, en sus próximas exposiciones, elige otro modo de rebatir críticas y de explicar la razón de sus decisiones.