El lugar común en la previa de cada Mundial es el de los candidatos a ser campeón, siempre se dice lo mismo, que son los mismos de siempre: aquellos países que ya levantaron la copa y alguna que otra sorpresa. En Qatar participarán 7 de los 8 campeones porque no estará Italia.
El país más ganador de todos los tiempos, Brasil, llegará a la Copa del Mundo en una situación parecida a la de Argentina: casi no perdió durante los últimos cuatro años, pero jugó pocos partidos contra las potencias europeas.
El seleccionado de Tite tiene a muchas de sus mejores figuras en las ligas más importantes del plantea: Neymar, Marquinhos, Casemiro, Raphinha, Gabriel Jesus, Vinicius, Rodrygo y siguen las firmas.
Los brasileños clasificaron invictos en las Eliminatorias, ganaron una Copa América en casa, perdieron la otra y en el período de Mundial a Mundial solo sufrieron tres derrotas: dos contra Argentina y la restante con Perú.
La mayoría de las opiniones coinciden en que Francia es el principal candidato entre los seleccionados europeos. El campeón vigente intentará romper el maleficio que sufrieron los últimos defensores del título: Italia en 2010, España en 2014 y Alemania en 2018.
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Le sobran cartas al equipo francés: Mbappé es la gran figura, acompañado por Benzema, Griezmann, Kanté, Varane, Coman, Kimpembe, Lloris. De todas formas, decepcionó en la Liga de Naciones, donde ganó solo 1 de los 6 partidos que jugó.
¿Qué será de Uruguay en el Mundial? El tercero en discordia en Sudamérica tiene con qué, pero siempre es una gran incógnita. Cambió de técnico sobre el cierre de las Eliminatorias, clasificó sufriendo y le tocó un grupo amigable con Portugal, Ghana y Corea del Sur.
Uruguay tiene un mediocampista que está entre los mejores del mundo: Federico Valverde. Ese es el punto alto del equipo de Alonso: cuenta con muchas variantes en la mitad de la cancha. Además del jugador del Real Madrid, tiene a Vecino, Bentancur, De la Cruz, De Arrascaeta y Torreira.
Lo más preocupante para los uruguayos es el nivel de sus delanteros: Cavani y Suárez ya no son lo que fueron, pueden competir contra los mejores, pero ya no están entre los mejores, y atrás solo asoman Darwin Nuñez, Torres y Satriano, tres pibes.
España es la selección europea con mejor presente: ganó su grupo en la Liga de Naciones, está en semifinales, y de la mano de Luis Enrique se reencontró con un estilo de juego. Ya hizo el recambio generacional y las previsiones para Qatar lo ubican entre los favoritos.
El seleccionado español tiene muchos y buenos jugadores en una edad justa, entre los 24 y 28 años: Pau Torres, Llorente, Asencio, Rodri, Morata. La generación intermedia cuenta con la compañía de pibes como Gavi y experimentados como Busquets o Jordi Alba. Combo interesante.
Entre los europeos, la gran incógnita es Inglaterra. De la mano de Southgate hizo un buen Mundial con un equipo joven, pensado para el futuro. Confirmó el rumbo con un 3° lugar en la Liga de Naciones 2019 y llegando la final de la Euro 2020, pero se cayó en los últimos dos años.
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Los ingleses tocaron fondo en la última Liga de Naciones: no ganaron ningún partido de los seis que jugaron y perdieron la categoría. Como ocurre habitualmente, casi todos los futbolistas de Inglaterra juegan en la Premier, pero no tiene grandísimas figuras -excepto Harry Kane-.
Alemania es otro de los equipos europeos que navega por aguas convulsionadas. Después del título en 2014, no pasó la primera fase en Rusia, hizo semis y octavos en dos Euro y no pudo meterse nunca entre los cuatro mejores de la Liga de Naciones.
Las esperanzas alemanas están puestas en los de la vieja guardia (Neuer y Müller), los buenos de siempre (Gündogan, Rüdiger, Kimmich, Goretzka) y pocos pibes que asoman (Havertz y Musiala). De todas formas, la frase hecha es inevitable: Alemania es Alemania.
Entre los que quieren sumarse al lote histórico de ocho países campeones del mundo, Bélgica es el seleccionado que más fuerza viene haciendo. La amenaza belga por ahora no pasa de ser eso: una amenaza porque hasta el momento no pudo ganar ningún título.
La plantilla que dirige Roberto Martínez tiene muchísimos nombres de primera línea: Courtois, Meunier, De Bruyne, Carrasco, Witsel, Lukaku, Hazar. Con todos esos jugadores, Bélgica es un candidato natural para meterse en la conversación grande.
Un escalón más abajo aparecen dos eternos aspirantes al título: Portugal y Países Bajos. Los portugueses le agarraron el gustito a los campeonatos: ganaron una Euro y una Liga de Naciones. Con Cristiano Ronaldo como bandera tienen motivos para soñar.
Los neerlandeses, por su parte, llegan a Qatar en alza: se metieron entre los cuatro mejores de la Liga de Naciones y ostentan un invicto de 15 partidos, con 11 victorias y 4 empates. Países Bajos tiene equipo y nombres: Van Dijk, Wijnaldum, De Jong y Memphis Depay, entre otros.
Adrede, el repaso, no contempla a la selección argentina: dueña del mejor invicto vigente del mundo (35 partidos) y reciente campeona de América. Faltan 50 días para el Mundial de Qatar: mejor no levantar la perdiz y seguir atentamente lo que hacen los potenciales rivales al título.
