Por el nombre

Gabriel Rodríguez

Hay personas que no se olvidarán jamás, porque dejaron un legado, fueron un espejo y todos, un poquito aunque sea, quisimos o queremos ser como ellos o por lo menos sentarnos en la mesa de al lado. Víctor Brizuela, Rubén Torri y Osvaldo Wehbe no hacen más que reafirmar aquello de que las personas no se van nunca.

Porque su impronta está, porque sus genes también están, porque frases como “cepillito”, “se ve venir el gol” y “la pelota se hace luna” las repetimos cada dos por tres y porque marcaron una manera de hacer periodismo que, con un poco más o un poco menos de condiciones tratamos de emular.

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A los tres los une un montón de cosas y una de ellas es una cabina de transmisión. El nombre “Víctor Brizuela” es el que lleva el sector principal de cabinas del estadio Kempes desde hace diez años pero hay una interesante movida para bautizar con los apellidos Brizuela, Wehbe y Torri a todos los sectores de prensa de las canchas de los equipos de Córdoba, en Capital y Provincia. Para que eso suceda, las instituciones deben aprobar en asamblea esa moción. 

El colega Ramón Gómez es el autor intelectual pero quiere sumar a todo el espectro periodístico local y cuenta que la idea surge luego de las ironías del destino con Wehbe, quien antes de dejar este mundo, fue despedido del medio gráfico en el que escribía. 

"Trabajo hace más de 50 años y los conocí a los tres. Para mí es un orgullo, sentí que los tres deberían estar en las cabinas de transmisión de las canchas de Córdoba", expresó.

Y explicó: "Se me ocurrió porque me dio una bronca bárbara cuando El Puntal de Río Cuarto sacó una página entera por la muerte de Osvaldo Wehbe. ''El Turco'' nunca pudo hacer una transmisión de fútbol en Río Cuarto. Y dije por qué nosotros, donde ellos trabajaron, no le vamos a poner su nombre en las cabinas. Que diga que los periodistas de Córdoba somos los autores de esta idea".

Víctor, ese comentarista con una verborragia única que se forjó en la universidad de la calle y hablaba idiomas sin haberlos estudiado, nació en el barrio de Bella Vista y era hincha del equipo de la “Décima”, afiliado a la Liga Cordobesa. Y cómo no iba a estar de acuerdo su club, presidido por Walter Mariño. 

"Me parece genial la idea. Brizuela fue un maestro para nosotros, un ídolo: hincha, socio y gran colaborador de Bella Vista", valoró.

Otro de los clubes de Liga Cordobesa que se suma a la cruzada es Las Flores, la casa del histórico dirigente Basilio Guerrero, que además brindará una celebración propia según nos contó su presidente José Barcelona.

"Estamos en pleno conocimiento de esta cruzada de homenaje a estos tres próceres del periodismo cordobés. Víctor, Rubén y Osvaldo bautizaremos nuestras cabinas. Queremos agregarle un homenaje propio del club, que los socios en conjunto con la comisión en la vuelta al fútbol le brindaremos un sentido homenaje", detalló.

Para la familia es una caricia al alma, siempre lo es, cuando el nombre de Brizuela es asociado a sencillos homenajes pero sentidos, y en este caso se propone un nombre más: el de Nilo Neder.

Víctor "Bichi" Brizuela, hijo del "Maestro" y titular de Radio Sucesos, expresó: "No me parece bien; me parece excelente que puedan estar juntos como en la vida. Y si lo podemos sumar al gran Nilo Neder sería una alegría enorme. Creo que todo el mundo del fútbol y el periodismo lo verá con buenos ojos".

Dante Felauto, presidente de General Paz Juniors sigue la misma idea anterior y pretende incluir también a Nilo Neder, hombre ligado al “Albo”. 

En ese sentido, detalló: "Sumamos a la moción a Neder por tener una historia en el club y ser un gran periodista deportivo en toda la provincia, nuestras cabinas tendrán el reconocimiento a esos cuatro prestigiosos periodistas que hicieron grande el fútbol de Córdoba".

Osvaldo Wehbe compartió micrófono con Brizuela por casi 16 años, primero en LV2 y luego en esta casa. Juntos marcaron el ritmo de las transmisiones de fútbol, en Córdoba, el país y el mundo. La magia de su voz se convirtió en un ícono por su prosa original y creativa, y marcó una época.

A pesar de ser uno de los mejores relatores argentinos, nunca dejó Río Cuarto y ese sentimiento federal emergió en él como bandera y así lo recuerda Florencia, una de sus hijas.

"La vida de mi viejo transcurrió de cabina en cabina. Seguro no hay alguna en el país que no tenga un recuerdo de una sonrisa de mi viejo. Las de Córdoba son las mas especiales, empezó a vivir los momentos más felices, pelear por lo local, lo federal. Ir a una cancha y ver su nombre en estos lugares donde habitó con tanto amor y pasión tendría un significado enorme".

Las cabinas de Córdoba fueron las más especiales para mi viejo

Estudiantes de Río Cuarto es el equipo más importante del sur cordobés y sus cabinas pasarán a llamarse Osvaldo Wehbe, tal como lo refleja Magalí Camia, jefa de prensa del “León”. 

"Tenemos la intención de que cuando se reanude todo hacer una inauguración y presentar un proyecto de ley al Concejo Deliberante para que las cabinas se llamen Osvaldo Wehbe, que por ahora no tenían nombre", especificó.

Sportivo Belgrano de San Francisco, otro gigante del interior de Córdoba, asintió sin pensarlo y su titular Pablo Esser destacó que una de las cabinas en el sector de transmisiones, llevará de nombre el tridente Brizuela, Wehbe, Torri. 

"Nuestro club está totalmente de acuerdo. Fueron tres periodistas de élite que en San Francisco apreciamos mucho. Cuando se haga realidad estaremos dispuestos y tenemos las cabinas preparadas", apuntó.

El “Chino” Torri fue un tipo generoso, un referente, humilde y dispuesto a ponerse a la par de un principiante para ayudarlo a formarse y mejorar. Relató más de 1.360 peleas y en el fútbol se dio el gusto y el lujo de hacer dupla con Enzo Ardigó, José Adelmar Rodríguez, Sergio Albarrán, Cherquis Bialo y entre 1985 y 1987 acompañó a Brizuela en LV2. Le dada un agudo a su grito de gol sin caer en la estridencia. Era impecable su narración post gol donde resumía la jugada previa. 

Torri unió generaciones, fue escuchado por abuelos, padres, hijos, nietos al ritmo del “pirimpimpimpumpin”. Nació en Pérez Milán, Buenos Aires pero terminó siendo más cordobés que la peperina e hincha de Instituto, cuyo sector de cabinas no tiene nombre. 

"En Alta Córdoba nuestras cabinas no tienen nombre, así que nos parece un excelente homenaje para esas tres grandes figuras", remarcó Roberto Castoldi, presidente de "La Gloria".

Talleres no utiliza La Boutique para sus partidos, pero igualmente el sector de cabinas tiene grandes chances de llamarse Brizuela, Wehbe, Torri. El gerente de marketing y relaciones institucionales, Miguel Cavatorta no tiene dudas de que el reconocimiento debe hacerse. 

"Para los que crecimos siguiendo el fútbol de Córdoba junto a la magia de la radio, los relatos del maestro Rubén Torri, el análisis del maestro Víctor Brizuela y todo el arte de Osvaldo Wehbe forman parte de nuestra historia como hinchas. Sus voces son testimonio de profesionalismo, honestidad y pasión, haciendo trascender a Córdoba", subrayó.

Frontales, singulares, especiales, con un carácter fuerte, trabajadores y periodistas sin pelos en la lengua para hablar cara a cara de jugadores y dirigentes. Los tres fueron “maestros”. De la vida y de la profesión. Por algo ese apodo era moneda corriente para señalar a quienes nos daban lecciones de periodismo sólo escuchándolos: “el viejo maestro”, “el maestro de Río Cuarto”, “el maestro Torri”. Cada uno a su estilo, tuvieron ese perfil docente que los hizo todavía más grandes porque sabiendo lo que eran, jamás se guardaron nada a la hora de enseñar y transmitir todo tipo de conocimientos.

En el mes del Maestro, este recuerdo a los nuestros.