Luego de la época dorada de las tenistas argentinas en los ’90, pocas figuras femeninas de nuestro país se destacaron y se mantuvieron vigentes en la escena internacional desde entonces.
Las jóvenes promesas de entre 18 y 25 años, que no cuentan con ranking WTA, se embarcaron en una lucha unidas en las cuentas de "Tenis Femenino" (@tenis_femenino en Twitter y @tenis.femenino en Instagram) para visibilizar sus necesidades y advertir que la falta de torneos de mujeres como así de patrocinadores que las acompañen.
Inés Gorrochategui, extenista argentina surgida en Córdoba, advirtió esta situación y dijo que faltan jugadoras.
"Creo que el tenis argentino de mujeres hace bastante tiempo que no produce una gran figura", dijo la top 19 en el mundo en 1994 y continuó: "Desde Paola Suárez y de Gisela Dulko, creo que unas de las carencias más grandes es que no hay una gran cantidad de jugadoras en la base y esa es una de las cosas que se tratan de trabajar y corregir pero es bastante complejo al ser un deporte individual y es bastante caro".
Gorrochategui apuntó que, a partir de esta situación, "muchas chicas se han dedicado a otras cosas como deportes colectivos": "Para un par también es difícil dejar que su hija viaje sola. Creo que la falta de reflejos a alto nivel de jugadoras argentinas, también hace que el interés no sea tan alto".
Creo que el tenis argentino de mujeres hace bastante tiempo que no produce una gran figura
En este contexto, Mercedes Paz, capitana del equipo argentino femenino de Copa Federación y exjugadora top 28, consideró que el tenis de mujeres atraviesa un momento difícil.
"La situación de las jugadoras del tenis argentino hoy es que está mejor que el año pasado en cuanto a organización pero está pasando un momento muy difícil porque están escasos de recursos", sostuvo y continuó: "Acá hay un lote de unas 15 chicas que juegan muy bien y que les hace falta más torneos".
Luego de las estrellas del tenis que brillaron en los ''90 como Gabriela Sabatini, Betina Fulco y Florencia Labat -como así Gorrochategui y Paz-; la cordobesa consideró que faltan figuras de renombre a nivel nacional que inspiren a las nuevas generaciones de deportistas.
"(En los ''90) había como un efecto contagio que después no logró darse en la época cuando surgió, por ejemplo, Paola Suárez quien fue una jugadora increíble", destacó.
Gorrochategui apuntó que la coyuntura socioeconómica del país desde el 2000 complicó las posibilidades de las jugadoras para viajar y subir en el ranking WTA.
"En nuestra época ya era complicado pero estas crisis en 2001 y esos años difíciles creo que hicieron complicado el desarrollo de las chicas. Hubo muchas que tenían un muy buen nivel. Hubo un equipo de sub16 que salieron campeonas del mundo. Tuvieron que viajar mucho solas en el momento que más necesitaban de una estructura que las acompañara y contenga. Fueron perdiendo años importantes de estructuras de entrenadores y preparadores físicos. Creo que a esas chicas se les complicó tener esa previsibilidad y puede ser una de las razones por las que se desperdiciaron algunas camadas", analizó.
Se desperdiciaron algunas camadas
Paz coincidió con este análisis y sostuvo que "el principal obstáculo que las chicas tienen es el económico" al tiempo que subrayó que "tienen un nivel técnico muy bueno".
Pese a este contexto, ve con optimismo el futuro de las tenistas y destacó la nueva gestión de la Asociación Argentina de Tenis (AAT): "Con Agustín Calleri, como presidente de la Asociación, se puso foco en el tenis femenino y empezó a cambiar: ya hay un programa, hay mujeres dentro de la comisión de la AAT como Florencia Labat -top 30 en el mundo-, también está Flor Molinero -que fue medalla panamericana en dobles- y principalmente que hoy hay más visión en el tenis femenino".
Más apoyo y más mujeres
La falta de figuras femeninas nacionales que convoquen a fanáticos y curiosos, se ve reflejado en las pocas transmisiones y torneos organizados.
Por eso, Gorrochategui considera primordial revisar el rol de las instituciones que forman a las futuras tenistas y construir un marco de contención que les garantice una carrera exitosa y sostenida en el tiempo.
Creo que el tenis de mujeres vende menos sin ninguna duda
"A mí me tocó una época en la que el tenis de mujeres era extraordinario y fuerte. Vendía casi igual que como el de los hombres", recordó.
Sin embargo, cuestionó: "Creo que el tenis de mujeres vende menos sin ninguna duda. Estas últimas 15 a 20 años, el tenis de hombres ha sido impresionante lo que ha traccionado. Además, los tres o cuatro jugadores que todavía siguen vigentes –a pesar que tienen arriba de 35 años- y en mujeres ha sido mucho más intermitente el tiempo que duraron las figuras".
Informe de Ivanna Torres Riesco.
