El "virus Quintela" no tiene vacuna

Adrián Simioni

Hoy le tocó al gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela. Es nuestro escándalo del día. En medio de la inflación que provoca el Estado en quiebra, Quintela no tuvo mejor idea que modificar una ley para poder cobrar su pensión de privilegio incluso antes de jubilarse, e incluso si, cuando termine su mandato, se acomoda en algún sillón estatal bien pago y sigue figurando como activo. Es una burla de principio a fin. Y una demostración más de estas castas que dominan a buena parte de las provincias argentinas.

Esas castas son una pandemia. Pueden quemar cada vez más dinero público por la sencilla razón de que viven de los impuestos que pagan otros habitantes del país; no de los que pagan sus súbditos. Los riojanos jamás se van a rebelar contra el virus de los Quintela porque a la pensión de su señor feudal no tienen que pagarla ellos. A ningún gasto tienen que pagarlo ellos. Los Quintela pueden acomodar en el Estado a todos los riojanos para comprar sus votos y su indiferencia, como nos cuenta Eduardo German, y tampoco tiene que cobrarles impuestos para poder hacerlo. Porque la plata viene de afuera. Sin parar.

En su libro "Una vacuna contra la decadencia", el ministro de Economía de Córdoba, Osvaldo Giordano, hizo el cálculo para 2019. Ese año, por todo concepto, La Rioja recibió de la Nación 1.644 millones de dólares. Y la Nación cobró allí apenas 610 millones de dólares. Más de mil millones de dólares que Quintela y su casta pueden gastar sin rendir cuentas. No hay mejor negocio en el mundo que ser una provincia feudal argentina. Quintela puede hacer lo que se le cante.

Hay 16 provincias como La Rioja, que reciben más de lo que ponen. A ellas hay que sumar la provincia de Buenos Aires, que, si bien pone más de lo que recibe, a todo lo que recibe lo gasta en el conurbano, que es donde están los votos. El conurbano es como una Rioja gigantesca que parasita al impotente interior bonaerense.

¿Quiénes ponen más de lo que reciben? Sólo 7 distritos: Córdoba, Santa Fe, Mendoza, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Neuquén. Córdoba por ejemplo en 2019 puso 9.300 millones de dólares y recibió apenas 6.600 millones. O sea que Córdoba mantiene unas tres Riojas.

¿Esta pandemia puede terminar alguna vez? ¿Hay vacuna para este virus institucional? No. Porque este es un virus autoinmune. Las 17 provincias tienen el 74% de los diputados. Y el 66% de los senadores. Y por lo tanto es imposible cambiar las leyes impositivas y de coparticipación, las llamadas leyes especiales, los subsidios del presupuesto nacional y la alianza populista entre el Conurbano y el norte del país que nos deja de cama desde hace 40 años.