El Olimpo de los privilegios

Miguel Clariá

 -Al margen de todo lo que se investigue, todo lo que establezca la justicia está esto de la irritante concesión de autos a legisladores, funcionarios y el secretario de un funcionario y amigo de función. ¿Quién es el que está controlando todo esto? Dirán que es para uso oficial, ¿quien establece cuando un vehículo está en función pública y cuando estaba en función privada? .

-¿Quién es el que anda detrás de un legislador diciendo usted está yendo a visitar a su mamá o está yendo a cumplir una importantísima función legislativa?. ¿Cuál sería la razón? Pero el legislador que cobró una dieta que no sufre angustia para llegar a fin de mes y que probablemente tiene su vehículo propio, y tal vez más de uno, ¿por qué entre todos los contribuyentes le tenemos que dar un auto y el seguro?

-Aseguran que hay tres mil cuatrocientos vehículos en esas condiciones.¿No sería razonable que se asignen al transporte de chicos discapacitados que están sin ese servicio por los ajustes, por los recortes a las maestras rurales haciendo dedo en la ruta?.

-Tenemos policías inmóviles para proteger a los vecinos. Es simplemente una autopercepción de privilegios que nos está castigando de una manera que ingresa en el territorio de lo indignante.

-Es cierto gobernante, cierto funcionario, ciertos legisladores, ciertos jueces. No todos. Seguro que no todos, muchos me temo que demasiados parece que trabajan para la antipolítica, para la anti institucionalización del país. Laboran para estimular la bronca por los privilegios.

- Privilegios que han existido siempre, pero hay que ser o muy ingenuo o muy cómplice para no darse cuenta que en el naufragio los salvavidas son escasos. Genera mucho más bronca el privilegio en el marco de una crisis brutal que está golpeando a los argentinos.

- Y por este tema no se pelean por el reparto de los autos. No se pelean, no hay grieta. Y si no ocurriera una tragedia como la que ocurrió, ni nos enteramos. Es Increíble que después, sin pudor ni vergüenza, no se ruborizan. Hablan de que hay que achicar el gasto puro. Hablamos de achicar el gasto público. Hay que hacer un esfuerzo entre todos. Hay que tener sólo el Estado necesario. ¿Será esto en serio?. ¿Esto será el Estado necesario?. Hay demasiados que siguen creyendo que llegarán a ocupar un sillón público por el voto en algunos casos o simplemente por la designación amistosa les concede derecho a percibirse por sobre el común de la gente. Sobre el común de los giles de a pie.

Lo que ni sueñan con un auto, creen porque llegan a ocupar un cargo del Estado, sobre los que sí deben ajustarse en todo, sobre los que sin límites, sin compasión, sin piedad. A puro verso ¿de qué le vas a ganar? A la inflación? ¿Le vas a ganar a la inflación asalariado?

- Siguen sintiendose una clase superior. Viven en una nube de eso que estás pensando. Se perciben como habitantes de un olimpo de privilegios naturalizado hasta que una tragedia en una ruta nos obliga a todos a preguntarnos¿ Por qué? ¿Por qué en el Estado se sigue gastando y utilizando los bienes de una manera que es ofensiva para el resto de una sociedad ?