Una postal de la ciudad

Fernando Genesir

 Estaba previsto que esta mañana la Municipalidad de Córdoba, a través de la directora del Instituto de Protección Ambiental, se presentará en Tribunales II para ratificar la denuncia penal presentada de manera virtual contra los responsables que rompieron un caño cloacal entre Villa Páez y un sector de Alberdi. La rotura de ese caño generó un desborde cloacal que se transformó en un río y, por supuesto, un desastre ambiental en toda esa zona que terminó colapsando.

. Hubo que evacuar a vecinos de esas cuadras porque no podían usar los baños de sus viviendas ya que no tenían agua potable. También porque la empresa rompió un caño de agua. Y más aún, porque los vecinos no podían ni siquiera entrar a sus casas porque la catarata cloacal inundaba las veredas. Según contó ayer en Cadena 3 el propio intendente Martín Llaryora, una empresa no identificada y que, por lo tanto, no tenía permiso para romper, destruyó un caño troncal de la red cloacal de 700 milímetros de diámetro en la calle Arturo Orgaz, casi Igualdad .Así como la escuchan, una empresa que va y rompe, que empezó a romper sin autorización. Y claro,generó este caos en la zona.

La municipalidad empezó a trabajar para solucionar tamaño problema. Pero claro, la obra va a demandar mucho tiempo. Será una obra larga porque para reparar un caño tan viejo hay quereemplazarlo.. Hay que hacer una plataforma , secar y recién después hacer el pavimento. A mí me llama la atención que se puedan hacer este tipo de cosas en una ciudad como Córdoba.

El municipio autoriza y dice donde se puede romper y donde no, con lo cual una persona, un vecino, una empresa, tienen que ir al municipio, pedir un permiso, porque es el encargado de autorizar porque sabe dónde pasa un caño o hay una interferencia de luz o de gas o de cloaca. Tiene un sentido.La ciudad es de todos pero yo no puedo hacer lo que se me ocurra. El propio intendente me decía que muchas veces cualquiera hace cualquier cosa. Y así terminamos. Por supuesto que hay otro factor no menor y es el estado de las cañerías muy viejas y la falta de inversión durante mucho tiempo en la ciudad de Córdoba. Por eso los desbordes cloacales se repiten, son recurrentes y aunque no llegan a convertirse, como en este caso, en una catarata, son casi una postal en muchos barrios de la ciudad de Córdoba.