Acuerdo con el FMI: temporada 95, episodio mil

Adrián Simioni

Comenzaron a trascender algunos de los posibles puntos del convenio con el FMI. Vamos a ver qué queda al final. Pero en principio queda claro que, otra vez, el peso del ajuste va a recaer sobre el sector privado más que sobre el estatal. Como siempre.

De hecho, lo más importante que se plantea es de reducir los subsidios a la energía. Eso está muy bien porque es irracional. Pero equivale a un aumento de impuestos. El déficit del Estado se va a atacar haciendo que los hogares paguen más por la luz. Pero el novio, el padre y el hermano de Luana Volnovich van a seguir como ñoquis en el Pami.

Fijate en esta medida. El acuerdo incluye un compromiso para aumentar la base imponible de los inmuebles en todo el país. El objetivo es que más contribuyentes superen el mínimo de 6 millones de pesos en patrimonio y entonces empiecen a pagar el impuesto a los Bienes Personales y que los que ya pagan, paguen más.

La valuación de los inmuebles depende de las provincias, porque en base a eso los gobernadores cobran el impuesto inmobiliario. Y ellos siempre trataron de no subir las valuaciones. Preferían subir las alícuotas, porque así ellos cobraban más, pero sus contribuyentes no pasaban a pagar también Bienes Personales.

Ahora el acuerdo prevé que haya una autoridad nacional encargada de valuar los inmuebles para subir los valores y que mucha más gente pague.

O sea, estamos otra vez en la misma. Otro impuestazo. Para los habitantes de Centralia, la franja central del país, tiene una agravante. Hay acá más propiedades y tienden a valer más que en otras zonas del país, con lo que, como pasa con todos los impuestos, esta zona aportaría mucho más que el resto del país. Pero, encima, lo recaudado se gastaría en su mayor parte en las provincias del norte y del sur y en el Gran Buenos Aires, como pasa también con toda la recaudación.

De manera que los legisladores opositores que se comprometieron a no subir más impuestos, y en particular los de Mendoza, Córdoba, Santa Fe, el interior bonaerense, Entre Ríos, entre otras, deberían rechazar frontalmente este punto.

Antes que seguir subiendo impuestos hay que echar del Pami a los parientes de Volnovich, para decirlo con una metáfora. De una buena vez, al ajuste que lo haga el Estado. Si no, estamos siempre mirando la misma pésima película.