¿Massa o Messi? ¿Quién tiene más chances de convertirse en héroe?

Adrián Simioni

Dan ganas de jugar al ahorcado: Massa o Messi. Casi las mismas letras. Dos apellidos que hoy cargan sobre la espalda dos máximas aspiraciones argentinas. Una, económica, política y social: Massa dejar atrás la inflación. La otra, deportiva, emocional: Messi tiene que traer la Copa.

¿Cuál de los dos tiene mayores chances de convertirse en héroe?

Empecemos por Messi. Sus chances son altas, si es que los sitios de apuestas sirven de algo: según Sky Bet, Argentina comparte con España el cuarto puesto entre los candidatos con mayores chances a quedarse con la copa. El favorito es, cuándo no, Brasil. Le siguen Francia e Inglaterra. La escuadra de Messi tiene mayores chances que un peso pesado como Alemania, por ejemplo.

El problema de Messi pueden ser las expectativas. Si no cumple, va a caer desde lo alto, desde el clamor récord de los hinchas, que vienen de verlo ganar la Copa América, alcanzar un récord de 33 partidos ganados, jugar bonito y en equipo, cantar el himno casi a lo Maradona y sin el menor rastro del pecho frío que algunos le endilgaron alguna vez.

¿Y Massa? El problema de Massa es otro. Muy distinto. Si nos guiamos por la historia, está en problemas. El último ministro de Economía en retirarse a tiempo y airoso, con cierto consenso unánime sobre su actuación fue Roberto Lavagna. Después de él vinieron 12 que se fueron sin laureles.

No sólo es un problema la historia para Massa. También lo es el presente. Asume un país sin crédito externo ni interno. Con un desierto de dólares y un océano de pesos.

Pero hay otro problema más definitorio. Si a Massa le va bien va a ser porque logre eliminar el exceso de pesos. Y eso implica algún tipo de ajuste. Implica perjudicar a algunos de los que tienen esos pesos excesivos que hay que hacer desaparecer de algún modo. O sea que, aún si le va bien, el destino de Massa es el de ser odiado al menos por un sector de la hinchada.

Para decirlo en otros términos, Messi tiene bastante chances de convertirse en héroe. En cambio, Massa tiene muchas chances de convertirse en villano si le va mal, y de convertirse en medio villano y en medio héroe si le va bien.