Los propietarios buscan más rentabilidad y los inquilinos piden pagar menos

La polémica en torno a la Ley de Alquileres continúa presente y dispara la puja entre propietarios, inmobiliarios e inquilinos. Unos reclaman más rentabilidad, los otros piden pagar menos. Mientras tanto, plataformas de alquiler turístico como Airbnb se presentan como una alternativa para propietarios que quieren facturar más con menos regulaciones.

Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina, brindó una entrevista a Radioinforme 3, por Cadena 3 Rosario, y remarcó: “La ley hoy no es aceptada, nació hace tres años y trajo inconvenientes. Departamentos de dos y tres ambientes están en valores impagables. Se está retirando la oferta y aparece el fenómeno de portales que dan dinamismo al alquiler diario y las rentabilidades duplican o triplican la rentabilidad”.

“La inflación se encarga de pulverizar la rentabilidad, que paso del 2 al 4 por ciento anual. En un alquiler turístico la rentabilidad no solo se sostiene, sino que se duplica o triplica”, insistió.

“El propietario o se retira del mercado o busca una alternativa como esta. La ley logró desmadrar el mercado. Estas startups son a beneficio del inversor y en perjuicio del sector inmobiliario”, destacó.

Por otro lado, Gervasio Muñoz, titular de la Federación de Inquilinos Agrupados, habló también en Radioinforme 3, por Cadena 3 Rosario, y respondió: “Cuando se dice que el mercado es soberano se plantea que el mercado define las reglas del acceso a la vivienda. No aceptan que el Estado ordene las reglas de juego”.

“La ley no se cumple. Hay un plan ideado por el sector inmobiliario para incumplirla en todo el país. Las inmobiliarias piden más dinero de lo que dice el índice porque los propietarios quieren más plata. El mercado inmobiliario está ligado al lavado del dinero, ni hablar de Rosario, donde el narcotráfico lo hace”, denunció.

Y planteó: “En Rosario ves torres en construcción en todos lados. El censo en Santa Fe marcó que hay más viviendas que hogares. Hay sectores que quieren maximizar la rentabilidad y millones de inquilinos que no pueden pagar los alquileres”.