Aislamiento en primera persona: la experiencia de Villa Azul

Silvia es vecina de Villa Azul, el barrio que abarca parte del partido bonaerense de Quilmes y Avellaneda, que fue aislado por completo por 15 días al detectarse más de 80 testeos de coronavirus positivos.

En diálogo con Cadena 3, reclamó una mayor organización para la distribución de bolsones y asistencia.

“Estamos esperando las nuevas noticias y los resultados de los otros testeos que se hicieron”, describió Silvia.

“Nosotros tratamos de estar tranquilos y mantener la calma y como otras madres desesperadas que necesitan leche y pañales”, expresó.

Silvia se encuentra en su casa con uno de sus hijos, mientras que envió otros dos a la casa de su suegra para no estar todos amontonados en la vivienda.

“Estamos adentro de la Villa tratando de asistir a la gente. Hay casos asintomáticos que no se quieren ir para no dejar a la mujer sola. Necesitamos ayuda y que se organice esto y que no sea un caos”, planteó.

Según la mujer, al desarrollar el cordón sanitario fue “un caos”. “Estuvieron haciendo los hisopados, bajaron tarde la mercadería, estuvieron repartiendo para los sintomáticos aislados y para las madres que más necesitan”, explicó.

“Tienen que organizarse porque es un caos”, señaló y aseguró que en la otra punta del barrio se prendió fuego.

Tenemos que estar 14 días acá adentro, no nos dejan traer cosas desde afuera

“Queremos ver la forma en que esto se organice, o que vengan los soldados y repartan ellos las cosas”, sugirió y advirtió que dicen que el barrio es grande, “hablan de 14 mil habitantes”.

“Hay señores grandes que están solos en la casa, hay gente que trabaja sola y otras personas que no pueden salir de la casa para buscar mercadería”, cuestionó.

Consultada sobre cómo surgió el brote, y los rumores de que en una cancha del barrio los chicos jugaban a la pelota pese a la cuarentena, Silvia contó: “Jugaban a la pelota porque no pensábamos que íbamos a llegar, la gente salía a comprar afuera pero adentro de la villa nadie salía y cuando el presidente dijo que podrían salir a trabajar ahí fue el contagio más grande”.

“En la cancha sí se juntaban todos, pero nunca supimos de un caso. Nos enteramos después por WhatsApp de un chico y de una mamá y ahí fue que dijimos que queríamos que nos testeen y decían que no porque no teníamos síntomas, pero estuvimos con un positivo”, desarrolló.

Entrevista de Miguel Clariá.