Asesinaron a un menor en una persecución policial

Un joven de 17 años murió en la madrugada de este jueves 6 de agosto en la Ciudad de Córdoba, luego de que el auto en el que viajaba evadiera un control policial y los efectivos dispararan, impactando una de las balas en su cuerpo, a la altura del omóplato.

La víctima, identificada como Valentino Blas Correas, iba con cuatro amigos en un Fiat Argo color blanco.

Según la reconstrucción de los hechos, el miércoles 5 de agosto a la noche, Blas, dos compañeros y la novia de uno de ellos se juntaron a comer unas pizzas en un bar del centro de Córdoba. Tras cenar fueron a buscar a un quinto amigo en barrio Parque Horizonte, con la idea de continuar la reunión en el domicilio de otro compañero. 

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(Foto: @eliasgudinho).

Al emprender el regreso hacia el Centro, el conductor, de apenas 18 años, dobló mal en la rotonda de barrio Las Flores y volvió en sentido contrario a la avenida Circunvalación.  Al intentar corregir el error, hizo una maniobra en “U” a la altura de la planta de Telefé Córdoba y ese giro provocó que dos motociclistas que circulaban por esa misma avenida en dirección al Centro los increparan.

Tras un intercambio mutuo de insultos, la moto alcanzó al auto en la rotonda de Las Flores y uno de los acompañantes del rodado menor rompió uno de los espejos retrovisores del Argo. La novia del conductor que iba en el asiento del acompañante se bajó a recogerlo.

"Sabemos que en algún momento, los jóvenes le refirieron al personal policial que mientras iban a la casa de alguien, en la zona de Canal 8, se les aproximaron dos sujetos en motocicleta, lo que ellos entendieron que iban a ser robados. Inclusive, señalaron que les dieron una patada al auto y que por eso emprendieron la huida", contó a Cadena 3 el comisario mayor Gonzalo Cumplido, subdirector general de Seguridad Capital, Zona Sur.

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Al continuar el trayecto, sobre avenida Vélez Sársfield, tras cruzar el puente de la Cruz Roja, divisaron un control policial, a la altura de Plablo Pizzurno. El automovilista  -por causas que se desconocen- se negó a frenar en el retén y en la huida los policías dispararon.

"En principio, los disparos fueron efectuados por personal policial", afirmó Cumplido el jueves, horas después de lo sucedido.

Frenético el conductor del Argo, tomó la rotonda de Las Américas, se incorporó en contramano a la avenida Ambrosio Olmos y luego siguió por Obispo Trejo. Antes de llegar al cruce con Brasil, los acompañantes que iban en el asiento trasero pidieron bajarse. 

Los dos jóvenes que iban atrás con Blas descendieron del vehículo y recién entonces el joven y sus amigos se percataron de que estaba herido.

El conductor y su novia intentaron llevarlo hacia la clínica Aconcagua, donde se negaron a atenderlo y le explicaron que tenía que dirigirse al Hospital de Urgencias. Al bajar por calle Chacabuco, un móvil policial le cortó el paso en el cruce con Corrientes.

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Cumplido indicó que allí la víctima recibió asistencia de médicos del servicio de emergencia municipal 107, pero que dejó de existir en el lugar. 

Este mismo jueves, la Justicia de Córdoba ordenó la detención de dos de los cuatro policías implicados en en el caso, que serían los autores de los disparos.

El fiscal José Mana imputó a los agentes por el delito de “homicidio calificado agravado”. Los efectivos, identificados como Javier Alarcón y Lucas Gómez, deberán contratar un abogado para afrontar la causa.

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Para el secretario del fiscal Mana, Gabriel Prunotto, el crimen de Blas Correas “está esclarecido”, pese a que los policías aseguraron que un testigo no identificado había visto cómo desde el Fiat Argo arrojaban un objeto en dirección al Pablo Pizzurno.

Al rastrillar la zona encontraron un viejo revólver 22 en una bolsa, pero todo apunta que podría ser un arma “plantada”.

“Estamos investigando porque la versión surge de la Policía. Apareció un testigo que dijo haber visto cómo se arrojó desde el Fiat Argo una bolsa -durante la persecución-, la que luego fue encontrada por los efectivos y en la que en su interior había un arma de calibre 22”, señaló Prunotto, pero aclaró: “El testigo aún no fue encontrado”.

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