Canadá y EE.UU. señalan a Irán por la caída del avión

Marcos Calligaris

El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, señaló este jueves que el Boeing 737 de la compañía Ukraine International Airlines que se estrelló en Teherán con 176 personas a bordo sin dejar sobrevivientes, pudo haber sido derribado por un proyectil iraní.

Trudeau señaló que de acuerdo a fuentes de inteligencia propias y de aliados de Canadá, "la evidencia indica que el avión fue derribado por un misil de tierra-aire iraní". Asimismo, sostuvo que "esto pudo no haber sido intencional".

Los comentarios del mandatario canadiense estuvieron en línea con los del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien horas antes apuntó que tenía "sospechas" sobre el accidente del Boeing ucraniano en Irán. Trump indicó entonces que "alguien pudo haber cometido un error", sin precisar detalles.

Una versión similar es la que maneja el Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania, que asegura que entre las posibles causas del accidente aéreo está un ataque de misiles. No obstante, el organismo contempla las hipótesis de un ataque terrorista o la explosión del motor debido a una falla técnica.

Irán y los "rumores ilógicos"

Por su parte, Ali Abedzadeh, jefe de la Organización de Aviación Civil de Irán, calificó las versiones sobre el presunto derribo del avión ucraniano con un misil de "rumores ilógicos", y agregó que es "científicamente imposible" que un proyectil haya impactado en la aeronave.

Finalmente, el portavoz del Gobierno iraní, Ali Rabiei, sostuvo que los informes que culpan a su país del accidente aéreo forman parte de "una guerra psicológica contra Teherán".

Al mismo tiempo, Rabiei pidió a los países que perdieron ciudadanos que envíen representantes para unirse a su investigación.

Horas más tarde, se conoció que la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de EE.UU. recibió una invitación formal de Teherán para sumarse a la investigación del accidente. La entidad estadounidense ya designó a un representante.

El vuelo trágico

El vuelo 752 de Ukrainian International Airlines se estrelló a los pocos minutos de despegar del Aeropuerto Internacional Imán Jomeini en Teherán, horas después del ataque de Irán a bases iraquíes que albergan solados estadounidenses. Las 176 personas a bordo murieron en el acto. El Ministro de Asuntos Exteriores ucraniano informó sobre las nacionalidades de quienes iban a bordo: 82 personas de Irán, 63 de Canadá, 11 de Ucrania (incluyendo 9 tripulantes), 10 de Suecia, 4 de Afganistán, 3 del Reino Unido y 3 de Alemania.