En Rusia ya multan por fumar en los balcones

Un residente de la ciudad de Izobilny, en el krai de Stávropol, fue multado este lunes por un incendio que comenzó por fumar en el balcón, según afirmó el representante oficial del departamento regional del Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso, Oleg Degtyarev.

El hombre fue reportado a partir de un flamante protocolo administrativo bajo el artículo "Violación de los requisitos de seguridad contra incendios", y deberá pagar una multa de 4.000 rublos (3.500 pesos argentinos).

Nuevas reglas para evitar incendios

El 26 de septiembre, el primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, firmó un decreto que modificó las reglas del régimen de incendios. 

A través del mismo, se prohibió la realización de fuego abierto en balcones, salas públicas, así como en habitaciones de residencias y hoteles. 

Las nuevas normativas prohíben incluso fumar y asar brochetas en el balcón. Los cambios entraron en vigor el 1 de octubre.

Estas medidas de protección contra los incendios causaron revuelo, y la prensa llegó a calificarlas como "la prohibición de fumar más dura del mundo". Así lo señaló Andréi Romáshkovel, periodista de la radio Business FM, quien en un artículo hizo mención a la experiencia de Costa Rica, que por el momento era considerada la nación más estricta para los fumadores.

Denunciar al vecino fumador

Los infractores pueden recibir una advertencia, o una multa de hasta 5.000 rublos (4.500 pesos argentinos) si la violación de la norma resulta en un incendio. 

El Ministerio de Situaciones de Emergencia agregó que si un incendio fue provocado por una colilla de cigarrillo, esto puede dar paso a consecuencias penales.

Asimismo, en los últimos años, en Rusia rige una normativa que facilita una compensación a las personas cuyas viviendas se vean afectadas por el humo de balcones cercanos. Así lo dictaminó la Corte Suprema en noviembre de 2017.

Desde 2009, cuando comenzaron a introducirse restricciones de fumar en lugares públicos, el consumo de tabaco en Rusia se redujo en un 20 %, según la última encuesta mundial sobre consumo de tabaco en adultos (Global Adult Tobacco Survey).

Informe de Marcos Calligaris