Jueza reconoció que los chicos se inician en el delito a menor edad

El caso de un adolescente de 15 años que fue detenido dos veces en menos de ocho horas dejó al descubierto las falencias del sistema penal juvenil, donde la Justicia y la Senaf se echan culpas por liberar a menores que delinquen.

Al respecto, la doctora Nora Giraudo, jueza penal juvenil de 4ª Nominación de Córdoba, dijo a Cadena 3 que hay una ley que se aplica, que es el régimen de minoridad y que contempla acciones como investigar los delitos, la personalidad y las condiciones de estos chicos en conflicto con la ley. 

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En ese sentido, dijo que uno de los puntos es "ponerlos en un lugar adecuado" durante el tiempo que sea necesario" con el objetivo de que se les pueda enseñar a ser personas útiles. Institucionalmente la Senaf se encarga de estos espacios.

En este marco la jueza indicó que los menores se inician en el delito cada vez a más temprana edad. "Lo dicen las estadísticas, cuando se inician en la droga, abandonan la escuela a los 12, 11 años y están muy próximos a los delitos porque quienes les proveen de las drogas le proveen de las armas y consiguen dinero más rápido", lamentó. 

Por otra parte, indicó que la Senaf es quien se encarga de los jóvenes en situación vulnerable, y a través del Complejo Esperanza de aquellos que están en la órbita del Sistema Penal Infantil, donde se debería posibilitar la realización de estudios y de disponer de medidas protectorias para su formación.

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“Pretendemos que les enseñen a ser personas útiles y si están vulnerados en sus derechos y han cometido delitos graves es la justicia la que debe disponer”, aclaró. Pero señaló que “cuando la justicia entiende que por el momento es conveniente que siga interviniendo Senaf, es ella la única responsable y no tiene que deslindar culpas sino responsabilidad”, manifestó.

Y reflexionó: “Lamentablemente los lugares adecuados no existen para este tipo de situación”.

“Hay un niño que debe ser protegido, pero la sociedad también porque existen víctimas de estas situaciones que son inocentes”, concluyó.

Entrevista de Miguel Clariá