Los abrazos que no se dieron

Miguel Clariá

 -Se hizo viral una reflexión en las redes de un tucumano que decía de haber sabido antes que con guita se arreglaba la violación de la cuarentena, muchos habríamos sacado un crédito para dar un último abrazo. Hemos tenido recién la explicación de Fabio Ferré .En realidad el presidente no podía acceder a ese beneficio de cerrar la causa con plata, porque estaba violando su propia su previo decreto.

- Hay otras opiniones, obviamente, el fiscal que ha hecho lugar a este perdón para Fernández y para su querida Fabiola, que brindaban con amigos y con buen champán mientras los argentinos no podían ni acercarse a sus seres queridos internados en sus últimos días. El afán de marcar diferencias en esa interna terrible que hay dentro del oficialismo. Los amigos de Fabiola subrayan que va a necesitar tomar un crédito porque no tienen esa plata, que es una devolución obvia a su jefa política, a la vicepresidenta. que podría pagar las dos multas, la de él y la de su querida Fabiola

-Pero en realidad el problema no es discutir si abusó o no. Abusó de la angustia, del dolor del duelo de cientos de miles de nosotros a quienes nos trató de idiotas si violamos el encierro mientras él estaba de fiesta. Trató de idiotas a los que pugnaban por cualquier modo de llegar a su familia tirándose al agua y muriendo o a una terapia intensiva, a despedir a un ser querido para acompañarla.

-Solange, como acaba de hablar Pablo Musse ,a solas ,que murió en soledad mientras su papá, pobre idiota, intentaba infructuosamente llegar a un sanatorio. Haber sabido antes que con guita se arreglaba, reflexiona hoy con bronca el tucumano

- Todas las pérdidas irreparables, todas las muertes en soledad, todos los abrazos que no se dieron ya no hay como pagarlos, aún cuando tuvieras crédito, ya no hay como pagarlo.