Aseguran que los médicos cometieron fallas en los protocolos

El fiscal Andrés Godoy se basó en elementos de prueba sobre fallas importantes en los protocolos vigentes para imputar a los médicos Lucas Figueroa y Marcelo Santiago Lázaro por el contagio de coronavirus en el geriátrico Santa Lucía de la localidad de Saldán, Córdoba.

Figueroa fue imputado por la Unidad Fiscal de Emergencia Sanitaria (UFES) -a prima facie- por “propagación de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas” en calidad de autor.

En tanto, Lázaro, director médico de la residencia geriátrica, está imputado por considerar que habría incurrido en la comisión del delito de “propagación culposa de enfermedad peligrosa y contagiosa para las personas”, agravada por el resultado de enfermedad y muerte, en calidad de autor.

La denuncia fue realizada por el Ministerio de Salud de Córdoba que, entre otros elementos, aportó informes por parte del PAMI, donde se dan por descontadas las fallas a la hora de aplicación del protocolo.

Además, los testimonios del personal no médico del geriátrico indican que Figueroa habría llegado a la residencia con fiebre y que tosía sin protección.

Aún no hay fecha para la declaración indagatoria, donde las partes podrán conocer los elementos de prueba que determinaron la imputación.

La decisión judicial provocó una multitudinaria marcha este lunes en la capital cordobesa en rechazo a las imputaciones.

Informe de Francisco Centeno.