Por Yeny Ortega Benavides
Fotos: César Lanza Castelli
Caminando por el pasillo central del Mercado Norte de la ciudad de Córdoba, casi llegando al final, una inmensa cola de gente anticipa que el local está a reventar. Se trata del puesto 30, donde está ubicada “La Pizzería del Mercado”, la más antigua y emblemática del lugar.
Al llegar al mostrador está ella, Stella Maris, el alma de todo lo que sucede dentro y fuera de la pizzería.
Al grito de “cuántos son, mi amor”, “ya los ubico”, y “qué les traigo”, Stella Maris comienza a destilar calidez, una calidez que la caracteriza desde hace 45 años, tiempo que lleva atendiendo el local.
“La pizzería fue fundada por mis viejos en 1947”, cuenta a Descubrí Sabores. “En aquellos tiempos eran calles de adoquines. Y así me crie yo, entre carretas y puesteros”, recuerda.
Stella Maris tenía tan sólo 15 años cuando una tragedia familiar, la muerte de su hermano, hizo que debiera tomar la posta y ponerse al frente del local. “No tuve otra opción, yo era el comodín de la familia”, bromea.
En 1986 se hizo cargo completamente sola de la pizzería. Es una época que nunca olvidará, porque en ese mismo año nació Osvaldo, su hijo, quien hoy tiene 35 años y trabaja codo a codo con su madre para sacar adelante el negocio familiar.
No alcanzamos a terminar de formularle la pregunta “¿Qué es para vos la pizzería?” y Stella Maris ya había terminado la respuesta: “Mi vida entera”.
Así lo hace sentir a los cientos de personas que a diario desfilan por el estrecho pasillo con el objetivo de encontrar un lugar en la pequeña barra o, en su defecto, llevarse una pizza para disfrutarla en sus casas.
“La pizza y su salsa son un punto de referencia en el Mercado, es fantástica. Pero la gente viene, y va a seguir viniendo no sólo por la pizza, sino por lo que es Stella”, cuenta a Descubrí Sabores, Rodolfo César Martínez, un asiduo cliente del lugar.
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Al local acuden todo tipo de personas. “Viene de todo: trabajadores, obreros, gente de clase baja, media y hasta políticos”, cuenta Stella Maris, al tiempo que nos muestra un video de un reconocido personaje, a manera de prueba.
La pizzería abre de lunes a sábados desde las 8 am y hasta las 18 horas. A esa hora ya hay gente esperando para comer pizza. “A veces no me dejan ni levantar la persiana”, asevera.
El menú es sólo uno: pizza. La pizza completa vale $650. También se vende por porción a $150. Se trata de una versión única y popular: la masa es alta, muy alta, crocante pero esponjosa, con muchísima salsa (levemente picantita), abundante queso y aceitunas sin mezquindad. Realmente sabrosa.
“El fuerte nuestro es la salsa”, asevera Stella Maris con total seguridad, al tiempo que niega que haya algún truco que la haga única. “Hay que hacerla con mucho amor”, asegura, y sonríe pícaramente.
Dependiendo del día, el local ha llegado a vender hasta 300 pizzas en una sola jornada. “Hay días en que me he quedado sin materia prima. A veces pasa”, cuenta.
En materia de bebidas, ofrece gaseosas de 350 ml a $100, o $300 las de 1,5 litros. La cerveza, helada, cuesta $300. También están quienes piden un vinito, en ese caso, se les ofrece un vaso a $100, acompañado de un sifón de soda que está incluido en el precio.
Todos los ingredientes se compran en el mercado. Eso garantiza productos frescos y ayuda, también, a mover el engranaje de ventas de los otros locales.
No hay dudas de que algo tiene la pizza del local 30 que la convierte en la favorita entre todas las opciones que ofrece el Mercado Norte. ¿Será la masa? ¿Será la salsa? ¿Será esa mirada cómplice y cálida con la que Stella te invita a pasar y te hace sentir como en casa?
Ella es mucho más modesta y simple a la hora de encontrar un por qué: “La gente va donde la atienden bien. Nosotros somos una familia con mucho swing, siempre estamos pum para arriba”, asevera entre risas.
La pizzería del mercado cuenta también con un local en Nueva Córdoba, en la calle Rondeau al 640 y cuenta con un patio cervecero.
La Pizzería del Mercado
Oncativo 50, local 30.
Mercado Norte, Córdoba
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