El 70% de los argentinos pensó en renunciar por la mala relación con su jefe

Un estudio de Bumeran -el portal de empleos y reclutamiento online líder de Latinoamérica- revela que el 70% de los argentinos ha considerado renunciar a su empleo debido a malas relaciones con sus jefes, destacando una creciente prioridad en la salud mental de los empleados y la tendencia a alejarse de ambientes laborales tóxicos. 

Sin embargo, la inestabilidad económica del país crea una barrera para que muchos puedan tomar esta decisión, llevando a la prevalencia de la "renuncia silenciosa", donde los empleados permanecen en sus puestos pero disminuyen su compromiso y rendimiento.

El informe "Líderes o jefes" muestra un aumento significativo en la cantidad de trabajadores insatisfechos con sus superiores en comparación con 2022. 

Este incremento del 52% al 70% destaca el papel crucial que juegan los jefes tóxicos en el bienestar de los empleados. 

Rocío, una abogada con pasión por su profesión, ejemplifica esta situación al sentirse ansiosa y menospreciada por su jefe, lo que la ha llevado a considerar cambiar de empleo, aunque la incertidumbre económica le impide tomar esta decisión con facilidad.

La psicóloga laboral Analía Tarasiewicz explica que los líderes tienen un impacto significativo en el desarrollo y la motivación de los empleados. 

Los jefes que crean un ambiente negativo pueden agravar problemas emocionales preexistentes y reducir el rendimiento y la motivación de su equipo. 

La "renuncia silenciosa" surge cuando los empleados, sin dejar su trabajo, pierden el compromiso y se limitan a cumplir con las tareas mínimas, afectando tanto a su bienestar personal como al desempeño de la empresa.

El fenómeno de la renuncia silenciosa se ha acentuado desde la pandemia, reflejando un cambio en la percepción del trabajo y la importancia de la salud mental. 

Facundo, un profesional de marketing, y Mariana, una periodista, ilustran cómo el maltrato y la falta de liderazgo en sus respectivos empleos les han llevado a perder motivación y considerar otras oportunidades, aunque ambos valoran los beneficios que sus trabajos actuales les proporcionan.

Para combatir ambientes laborales tóxicos, Tarasiewicz sugiere resignificar el trabajo actual y planificar una estrategia laboral a largo plazo. 

La clave es identificar lo que realmente se desea y buscar oportunidades que se alineen con esos objetivos. 

Además, recomienda hacer actividades que conecten a la persona con sus pasiones y priorizar la salud mental para evitar consecuencias negativas a largo plazo.

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