Por qué Ferran Adrià cerró el mejor restaurante del mundo

Ferran Adriá -considerado el chef más influyente e importante del mundo- llegó a El Bulli, un restaurante de cocina de innovación ubicado en España, en los años 80 y comenzó a captar la atención de los comensales más exigentes de distintas partes del mundo que llegaban al lugar para dejarse sorprender con recetas, mezclas y texturas nunca antes vistas.

Su fama se extendió por todo el planeta. El Bulli logró 4 estrellas Michelín y recibió el título como Mejor Restaurante del Mundo en los años 2002, 2006, 2007, 2008 y 2009.

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Cuando estaba en pleno auge, y pasaba por su mejor momento, el afamado chef tomó una drástica y trascendental decisión: cerrar El Bulli.

“Nuestra misión era buscar los límites que había en la experiencia gastronómica y, con esto abrir caminos para otros profesionales. En el 2009 vimos que habíamos alcanzado ese límite y que no tenía sentido seguir”, explicó Ferran Adrià en una entrevista exclusiva con Cadena 3.

El 31 de julio de 2011, El Bulli recibió a sus últimos comensales, despachó su última comanda (4 fondeus) y cerró sus puertas.

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“Estábamos felices por el trabajo logrado. Sabíamos que íbamos a continuar de una manera u otra. Sabíamos que el trabajo estaba bien cumplido”, dijo el afamado chef, hoy devenido en facilitador de charlas sobre creatividad e innovación, y embajador de la multinacional Telefónica.

El Bulli reabrirá sus puertas en junio como museo. Se llamará El Bulli 1846, en honor a la cantidad de recetas que se prepararon en el restaurante.

“Vamos a mostrar lo necesario para comprender qué pasó para que El Bulli fuera El Bulli. Estoy seguro que a la gente le va a encantar”, finalizó Adrià.

Informe de Yeny Ortega Benavides.