Diferencias entre las Córdoba de la Nueva y Vieja Andalucía

La ciudad de Córdoba fue fundada el 6 de julio de 1573 por don Jerónimo Luis de Cabrera, nacido en Sevilla, Andalucía, perteneciente a la corriente colonizadora del Perú.

El acto fundacional se concretó en la margen izquierda del río que los aborígenes llamaban Suquía. Los comechingones vivían en comunidades denominadas “ayllus”; eran barbados, habitaban viviendas semienterradas y practicaban agricultura.

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La Cañada, una de las bellezas de la Córdoba de la Nueva Andalucía.

El puente Romano.

El nombre dado por Cabrera a la ciudad es un homenaje a la Córdoba española, también de la comunidad de Andalucía, y a partir de 1573 se la comenzó a diferencia de la Nueva y de la Vieja Andalucía.

Ambas fueron fundadas en depresiones naturales, atravesadas por sendos ríos: para los españoles, el Guadalquivir; para los argentinos, el Suquía.

Ambas colindan con faldeos serranos: en un caso, los de la Sierra Morena; en el otro, los de las Sierras Chicas. También se las reconoce por su similitud climática.

No obstante, el río Suquía es apenas un hilo de agua al lado del Guadalquivir, mientras que las Sierras Chicas, son más elevadas que la Morena.

La Catedral y el Cabildo de la Córdoba argentina.

La mezquita-catedral, por dentro.

Otras de las diferencias es la imponente mezquita-catedral de Córdoba, uno de los puntos turísticos más importantes de la ciudad española, y también, en el mismo sentido, la influencia de la religión islámica.

Sin embargo, con similitudes o diferencias, las dos ciudades están hermanadas por cuestiones naturales y las raíces del fundador, ya que si bien Jerónimo Luis de Cabrera era sevillano, la familia materna de su esposa Luisa Martel de los Ríos era oriunda de la Córdoba andaluza.

Fotos de Córdoba de la Nueva Andalucía

Córdoba de la Vieja Andalucía