Inventó un cáncer para que sus amigas le paguen la boda

En junio de 2015, Toni Standen les dijo a sus amigas Ashlea Rowson y Jennifer Douglas que le habían diagnosticado cáncer vaginal y que su estado era terminal.

Pasado un tiempo, les contó que le quedaban dos meses de vida y que su sueño era casarse con la ilusión de que su padre, de 57 años y quien sí padecía la enfermedad, la entregara.

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Standen les contaba periódicamente cómo iba avanzando su tratamiento. Se rapó la cabeza y subía, con frecuencia, información a sus redes sociales. Nadie sospechaba de su mentira.

Sus amigas decidieron recolectar fondos en una página web con la idea de darle el casamiento de sus sueños y juntaron 8.500 libras.

Aunque el padre falleció,la boda de realizó. En la fiesta, las amigas proyectaron un video grabado por el hombre en su lecho de muerte.  

Entre otras sorpresas para ella, hubo un video grabado por la estrella del equipo de fútbol Everton y una luna de miel en Turquía.

Pero las amigas comenzaron a sospechar que no tenía cáncer cuando comenzaron a ver que Toni seguía viajando por el mundo.

Tras la luna de miel en Turquía, ella y su esposo viajaron por Italia, Alemania, Hungría, Austria y República Checa.

Resulta que la pareja continuó viviendo del dinero que recaudaron sus amigas durante años.

La farsa quedó al descubierto cuando las amigas decidieron grabar una conversación telefónica en la que le preguntaron si era cierto que estaba enferma o no. Ella confesó durante la llamada y luego envió mensajes de texto disculpándose.

La mujer fue denunciada y un juez le dictó una sentencia de 5 meses en la cárcel. Además, debió devolver 2 mil libras a un comerciante local que había aportado esa suma tras conocer su triste historia.