Mariano Oberlin y una labor que supera lo espiritual, para transformar vidas

Rony Vargas transmitió el programa de hoy desde la  Parroquia Crucifixión del Señor junto al padre Mariano Oberlin y destacó su labor en el barrio. "Es una iglesia que acompaña a mucha gente, lugar de protección y refugio para muchos", dijo.

"Hay mucha gente que me ayuda en cuestiones sociales, tiene una trayectoria de años, somos muchos" agregó el presbítero.

También afirmó: "Los jóvenes que acuden en busca de rehabilitación son  entre 30 y 50"

Hace pocos días el Padre Mariano Oberlin cumplió 50 años. En 2003, cuando se ordenó sacerdote, fue enviado a la localidad de Obispo Trejo. Allí estuvo dos años. Fue vicario parroquial también en Alta Gracia y en La Calera.

En 2010 llegó a este lugar de barrio Müller. La Parroquia extiende su influencia a barrio Maldonado y a seis villas miseria aledañas (Villa Inés, Campo de la Ribera, Bajada de San José, Villa Hermosa, La Barranquita y Los Tinglados).

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Lo impactó ver las calamidades que produce la droga: chicos atrapados por el consumo, disputa entre narcos en las calles, pobreza. Y sintió que su tarea no podía limitarse a dar misa. Su misión ya ha superado lo meramente espiritual y se ha volcado a transformar la vida de la comunidad que lo rodea.

En sus inicios, organizó talleres de oficios para los jóvenes, que se fueron ampliando hasta instalarse en un galpón en el barrio Maldonado, donde luego, con fondos del Sedronar, se construyó un edificio. La obra fue realizada por los propios chicos de la zona. Allí se inauguró en 2020, gracias a un convenio con la Universidad Siglo 21, un Centro de Aprendizaje Universitario (CAU) en el que se dictan carreras virtuales. También se han firmado acuerdos con la Universidad Nacional y con la Provincial de Córdoba para desarrollar cursos de extensión.

- Su visión es clara: las claves son el trabajo y a la educación.

-Hay dos proyectos en marcha: la empresa Tres Construcciones (3C), a partir de una iniciativa que conduce el emprendedor social Lucas Recalde y que impulsa una técnica constructiva a partir de ladrillos de plástico reciclado. Y la marca “Mundo Müller”, que incluye una fábrica de tejidos y la producción de planchetas para cocina, parrillas y tablas de madera para picadas, entre otros productos. En estos proyectos trabajan los chicos del barrio.

Un terreno fiscal abandonado se ha reconvertido en espacio productivo, que muestra a las claras los resultados del trabajo que conduce desde el Centro de Acompañamiento Comunitario “Héctor Guillermo Oberlin”.

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La propia comunidad ha construido casas donde viven hoy alrededor de 30 personas que se suman a los proyectos del centro de acompañamiento. Varios de ellos están dándole batalla a las adicciones.

El padre Mariano recibe ayuda de gente que se compromete a trabajar en estos lugares, y destaca la importancia de la intervención del Estado, desde sus distintos niveles, para ayudar a cambiar la vida de la gente de la zona. Por ejemplo, la inauguración del Parque Educativo Este, construido por la Municipalidad de Córdoba, la rehabilitación de la Costanera y la mejora de los accesos desde la ruta.

Destaca también la necesidad de mejorar el acceso a internet de los vecinos para realizar los cursos educativos que ofrece el centro.

Entrevista de Rony Vargas