Mintieron para salvar al conductor de una "picada" fatal: fueron condenados

Juan Federico

A Mauro Minoli le aplicaron dos años y seis meses de prisión condicional por el delito de falso testimonio.

A Mateo Svelitza, el juez unipersonal Eugenio Pérez Moreno, de la Cámara 8° del Crimen de la ciudad de Córdoba, le aplicó dos años y 10 meses, también de ejecución condicional, por la misma figura penal.

¿Por qué mintieron ante la Justicia? Para favorecer a un amigo, Álvaro Sánchez Pulgar, quien junto a Francisco Catalano protagonizó la trágica "picada" vial ocurrida en la madrugada del 3 de febrero de 2019 en el camino de Intercountries, Villa Warcalde, en la zona noroeste de la ciudad de Córdoba.

Dos autos que a la salida de un boliche aceleraron en una carrera informal e ilegal hasta que el vehículo que conducía Catalano terminó por volcar. Como consecuencia del despiste murieron dos jóvenes que viajaban con él: María Grazia Constanzo (19) y Federico Cariola (22).

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"No se trata por lo tanto de un delito común, sino que por el contrario se trata de idear mentiras a través de las cuales inducir a error a un funcionario judicial, burlando así todo el sistema judicial, el que se ve menoscabado y puesto en peligro en su base de credibilidad, donde se avizora la verdadera dimensión de la peligrosidad de este tipo de delincuencia", resaltó en los alegatos el fiscal de Cámara Hugo Almirón.

De esta manera, el funcionario judicial avaló en el juicio la instrucción que en su momento había realizado el fiscal Juan Pablo Klinger luego de que en el juicio por la "picada" fatal se ordenara investigar a estos dos jóvenes por el presunto delito de falso testimonio.

"Ello determina la necesidad de dar señales claras de juzgamiento de estos hechos y su penalización concreta (...) En atención a las pautas subjetivas relacionadas a los imputados, surge que se trata de personas adultas, con instrucción (ambos con estudios universitarios en curso), con familias y unidos entre ellos por una relación de amistad. Todo ello indica que poseen, y poseían, capacidad para reconocer la antijuridicidad de sus conductas conforme a derecho, por lo que los motivos que los habrían conducido a delinquir no reflejan ignorancia ni estado de necesidad", apuntó Almirón en contra de los ahora condenados.

Entre otras pruebas, se destacó que Minoli (que acompañaba a Sánchez Pulgar en la madrugada de la tragedia) dijo que no recordaba nada porque estaba borracho, algo que luego se comprobó que era falso, ya que en diversos chats había contado a sus conocidos qué sabía de lo sucedido.

A Svelitza también se le reprochó haber mentido ante la Justicia, ya que a través de un grupo de chat que compartía con Sánchez Pulgar y otros amigos había conocido pormenores de lo sucedido, algo que luego negó. Aquellos mensajes habían sido borrados antes de que la Justicia les secuestrara los teléfonos.