Se celebró el 50º aniversario del túnel subfluvial

Autos clásicos y antiguos cruzaron este sábado por la tarde el túnel subfluvial Raúl Uranga-Carlos Sylvestre Begnis, que vincula las ciudades de Paraná y Santa Fe, como parte de los festejos por el 50º aniversario de esa obra, informó la Comisión Administradora del enlace.

Desde las 16,30 hubo exhibiciones de vehículos, intervenciones circenses, exhibición de saltos de paracaidistas y puestos de comida.

Para finalizar la jornada de aniversario se realizó el cruce de los autos clásicos y antiguos en sentido Santa Fe-Paraná, por lo que no se interrumpió el tránsito.

Los vehículos pertenecen a la Asociación Santafesina de Autos Antiguos y al Club de Automóviles Antiguos y Clásicos de Paraná, y la actividad tuvo lugar en el parque Tessio, ubicado en la cabecera santafesina del viaducto, con entrada libre y gratuita.

Con el cruce se buscó "reeditar la emblemática caravana de vehículos de época que atravesaron por primera vez el viaducto, hace medio siglo", según los organizadores.

Entre los vehículos que circularon se encontraban marcas como Rambler, Ford Falcon, Torino, Valiant, Peugeot, Ford Fairlane, Renault 4 y 12, Fiat 600, Citroën, Kaiser Carabela, Bergantín, entre otras.

Juan José Martínez, director de túnel subfluvial del lado de Entre Ríos, contó a Cadena 3: "Es la obra de ingeniería más importante de Latinoamérica, es un túnel federal, está hecho por debajo del río Paraná, no toca la tierra".

En cuanto a la seguridad, indicó: "Hay radares en funcionamiento que indican al usuario la velocidad, la distancia, no nos interesa cobrar multas sino que no haya accidentes, es mínima la posibilidad de un accidente".

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El 15 de junio de 1960 los gobernadores de Entre Ríos y Santa Fe, Raúl Uranga y Carlos Sylvestre Begnis, respectivamente, firmaron el tratado para la construcción del túnel subfluvial, con los gastos divididos en partes iguales por ambas provincias.

La construcción, que involucró a unas 2000 personas en sus varias etapas, estuvo a cargo de un consorcio formado por la compañía alemana Hochtief AG, la argentina Sailav y la italiana Vianini SPA.

El 13 de diciembre de 1969 el presidente de facto Juan Carlos Onganía inauguró el túnel, y quedó atrás la balsa a cadena con largas esperas, incomodidades y lentitud en el cruce.