Una pyme denuncia que el sindicato le bloqueó la planta

El encargado de la planta Danal de Saldán, Gustavo Cipolletti, denuncia que el Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación Córdoba (S.T.I.A.) les bloqueó la planta este viernes y no los dejan trabajar. 

Señaló que los trabajadores de la empresa que fabrica snacks se pusieron en contra del gremio, fueron al Ministerio de Trabajo a hablar con el ministro para decirle que "no quieren saber más nada con el sindicato, que no quieren pertenecer más".

Cipolletti remarcó que el sindicato de alimentación llevó a cabo la elección de dos delegados que la empresa había echado "porque eran los que menos trabajaban". 

Habían sido despedidos, y lo mismo realizaron la elección. Fueron nombrados por el sindicato y no por la gente

En este sentido, también sostuvo que el viernes se realizaron enfrentamientos entre los trabajadores y el sindicato. "En todo el país funcionan igual los sindicatos. Extorsionan a las empresas para que cierren, no para lograr cambios. Le cierran la puerta a los trabajadores", agregó el encargado de la planta.

Por esta situación, los trabajadores de la empresa salieron el viernes a manifestarse para decir que el sindicato no los representa y "vinieron en patotas de 50 personas contra otras que simplemente vienen a hacer su trabajo, que no están acostumbradas a pelear, ni a que les griten en la cara. Nos quemaron gomas y nos tiraron piedras en contra de la fábrica", contó.

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Del Ministerio de Trabajo vieron la situación en donde los empleados estaban manifestándose en contra del sindicato y no en contra de la empresa, y que aquellos estaban hostigando a los asalariados en vez de defenderlos, "como deberían hacer".

Cipolletti contó que le dijo a la Policía que les prendieron fuego al lado de donde están los tachos de aceite, que son inflamables, y que si las llamas los alcanza, se prendía fuego todo. "La Policía me dijo que no podían hacer nada, que llame a los bomberos".

"Llamamos a los bomberos y los sindicalistas no los dejaban pasar. Salimos nosotros a intentar apagar el fuego y nos tiraron piedras. La Policía no hizo absolutamente nada", remarcó.

El encargado de la planta agregó: "Además de que todo podría haber terminado en una tragedia, estamos hablando de una pyme, no de una empresa multinacional o nacional que está en todo el país. Estamos en Saldán, es una empresa que en 5 años ha tomado 20 personas más para trabajar porque veníamos creciendo, veníamos bien".

Decepcionado, remarcó que cuando ven que una empresa crece, los sindicatos empiezan a poner "palos en la rueda" para que no crezca más. "Es la peor parte que tiene la Argentina", completó.

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