Un umpire argentino arbitró la histórica final de Wimbledon

Además de pasar a la historia como la final más larga de Wimbledon, el maratónico choque decisivo en el que Novak Djokovic derrotó en cinco sets a Roger Federer también será recordado por un dato inédito, ya que fue la primera vez que un argentino arbitró una final de un Grand Slam.

Se trata de Damián Steiner, quien entró en los libros grandes del tenis argentino luego de ser el juez de silla de la épica final del torneo inglés.

"Todavía estoy cayendo después de las diferentes sensaciones del partido de ayer. Fue un partido que será inolvidable. Tuve una carga emotiva muy importante. Por los jugadores, el entorno, la final y cómo se dio el resultado, será un juego para recordar toda la vida", se emocionó.

"Me avisaron un par de días antes que tenía posibilidades, pero cuando finalmente me enteré el jueves a la noche, me puse a disfrutarlo", contó en Cadena 3.

"El partido de tenis a veces dura una hora o dos. No esperaba que dure cinco", bromeó.

Pese a que había tenido algunos cruces con Djokovic en otros juegos, el árbitro los desdramatizó y afirmó que "es lógico que haya alguna situación" de ese tipo, "pero ayer (por el domingo) hubo un gran respeto por parte de los tres".

"De mi lado estoy contento porque el partido se desarrolló de la mejor manera. No salí en ningún diario el lunes a la mañana que hablara de mi actuación", se alegró.

Además de Steiner, hubo otros dos árbitros argentinos en el torneo: los jueces de línea Alejandro Roldán y Yamila Halle, que forman parte de los "varios árbitros que van habitualmente a los Grand Slams", según Steiner.

_{Steiner, en el medio, flanqueado por Alejandro Roldán -que fue juez de línea este año en Wimbledon- y Patricio Estévez.}

"Hemos hecho seminarios, vamos a hacer cursos. Estamos dándole un enfoque distinto al arbitraje en los últimos años", aseveró.

Además, Steiner aprovechó el diálogo para contar algunos detalles de su trabajo como umpire, usualmente desconocidos para los amantes del tenis.

"No hay relación con los jugadores. Estamos en áreas absolutamente separadas en los torneos. La única chance de verlos es en la cancha", comentó.

"Vivo en Argentina, tengo hijos y siempre la idea es hacer un par de semanas y volver, de esa manera tengo armado el calendario. Sin dudas que es duro pero se puede, es un muy lindo trabajo y hay que aprovecharlo", completó.

Entrevista de Fernando Barrionuevo.