"La Rana" Valencia recordó el debut argentino en el '78

Jorge Parodi

Hace 42 años, la Selección Argentina, con José Daniel Valencia como titular, comenzaba su camino hacia su primera Copa del Mundo, en el Mundial de nuestro país en 1978.

El 2 de junio, la Selección dirigida por César Luis Menotti derrotó a Hungría por 2 a 1, con goles de Leopoldo Luque y Daniel Bertoni, después de estar perdiendo por 1 a 0.

Nuestro seleccionado, que 23 días después se consagró campeón del mundo por primera vez, integraba el mismo grupo que Francia e Italia.

Más de 70.000 espectadores presenciaron el partido, y entre los titulares de Argentina estaba José Daniel Valencia, en ese momento jugador de Talleres.  

“La Rana” contó a en diálogo con Cadena 3 lo que vivió esa noche del 2 de junio de 1978: “Siempre me pongo muy contento para esta fecha. Fue el partido que tanto estábamos esperando. No empezamos bien frente a Hungría, perdíamos 1 a 0. Pero encaré, hice una gambeta, pasé dos o tres rivales y me hicieron foul cerca del área. Al tiro libre lo pateó Kempes, el arquero húngaro dio rebote y apareció Luque para convertir el 1 a 1”.

“Creo que aporte mi granito de arena con esa jugada, porque íbamos perdiendo, era el primer partido, lo dimos vuelta y nos sacamos un poquito esos nervios y nos aflojamos. En el Mundial fuimos de menor a mayor”, recapituló.

Para el deportista, el cruce inicial fue muy importante porque abrió el camino para lograr lo que después consiguieron: la Copa del Mundo.

El ex mediocampista remarcó que llegar a un Mundial no es fácil y que ni siquiera se acuerda que hacía frío “por el calor que había dentro de la cancha”.

“Recuerdo que los viajes en ómnibus desde nuestra concentración en José C. Paz a River eran eternos, era un camino humano, porque la gente nos acompañaba y alentaba en el trayecto”, valoró.

Valencia recordó que después de ganar la final no se quedó en la cena de los campeones, sino que dejó una nota escrita y se fue a ver a su mamá a Jujuy.  

Y revivió la anécdota: “Le ganamos a Holanda y a la noche era la cena oficial donde se entregaban premios. Decidí no ir, para ver a mi madre en Jujuy. Quería abrazarla, ir a mi casa, estar con mis amigos. Siempre fui muy apegado a mi familia, fue algo muy lindo, soñado y esperado”.

El ex Talleres explicó que hacía 5 meses estaban concentrados y que cuando tenía permiso iba a Córdoba, jugaba con “La T” y de ahí volvía con la Selección.

“Le dejé al preparador Físico Ricardo Pizarotti una nota escrita que me iba a ver a mi mamá, que me disculpara con todos y que gracias a Dios habíamos sido campeones”, detalló.

“Cuando llegué a mi casa en Juyuy, me atendió la empleada de mi mamá y me dijo: ‘Qué hace usted acá?’ y le respondí ‘¿Cómo qué hago?’. –‘Su mamá se fue a una Avenida a esperarlo junto a la gente’, me respondió. Claro, sin imaginarme lo que pasaba, yo había llegado a mi casa por un camino más corto y no pasé por el lugar donde la gente me esperaba”, concluyó.

Finalmente, repasó ese esperado reencuentro con su mamá: “Cuando volvió mi madre me dijo “Danielito (me llamaba así porque era el más chico) dónde estabas? Y nos abrazamos muy fuerte, fue un reencuentro hermoso.”