Su esposo le donó un riñón y le cubrieron una droga carísima

Una mujer cordobesa recibió finalmente este miércoles un trasplante de riñón que le donó su esposo luego de que la obra social Apross le cubriera una de las medicaciones más caras del mundo. 

Se trata de Ivana Vechio, de Oncativo, quien recibió de su marido, Mariano Bussone, un riñón por un síndrome urémico hemolítico genético atípico. 

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"Estoy muy emocionada, pero muy bien. Nos estamos recuperando como había sido presagiado por los médicos. Nos estuvieron cuidando mucho en este tiempo, porque fue larga la espera. Para uno que lo pasa es angustiante ese día a día, de saber que se iba a dar, pero no sabías cuándo", contó a Cadena 3 este jueves tras la operación.

Ivana destacó que tuvieron la gran noticia de que Apross cubría el medicamento, Soliris, a fines de septiembre.

"Yo era la primera afiliada de la obra social que lo estaba pidiendo. No es de acá y era complicado, muy oneroso. Pudimos concretar la fecha y tuvimos que esperar al 3 de noviembre y hacer el trasplante", apuntó.

A su vez, contó que su marido está muy feliz y aún algo dolorido, porque es una cirugía muy invasiva, pero de buen ánimo. Si todo sigue bien, el lunes estarán los dos en su casa.

El riñón está funcionando como corresponde, está reaccionando como debe ser. Tengo un par de días más de sondas y luego verán cómo va reaccionando

Y valoró: "Tendremos una vida mejor. Ya hacíamos de las nuestras con mi escasa función renal: que el mundo se agarre con nosotros dos sueltos".

Meses atrás, había hablado con Cadena 3: "Mis médicos son mis ídolos. Hace 25 años me agarraron de las pestañas y me devolvieron a la vida. Fueron nueve meses de una lucha continua. Estaba más para el arpa que para la guitarra. Tenía que poner de mí, porque, si no, la historia era otra. Dupliqué mi vida: tenía 24 y hoy tengo 49. Quiero llegar por lo menos hasta los 75".

Por su parte, Mariano expresó en ese entonces: "Tomé la decisión de entrada y la mantengo. No debería haber lista de espera para trasplante de riñones, es mucho más simple de lo que normalmente vemos, tendríamos que ser más humanos (...) Siempre hay una luz de esperanza y alguien que te está escuchando. Siempre tiene que haber alguien con el corazón abierto y dar mejor calidad de vida al resto. Por ahí somos un poco egoístas como seres humanos, pero vale la pena hacerlo".

Entrevista de "Turno Noche".